Luego del cambio de nombre y mucha espera en su totalidad, un nuevo Dragon Age ha entrado en juego. BioWare se las ha jugado todas para que The Veilguard sea el juego definitivo que con mucho amor han hecho para nosotros o para un grupo en específico como hemos podido ver.
Abundar en las cosas que ya muchos se imaginan es algo de mucho conversar. Dragon Age: The Veilguard se ha convertido en un hazme reír en muchos sentidos, arruinando por completo el buen sabor que tenemos de Inquisition. El objetivo de este RPG de un solo jugador es ser el héroe en el que todos confiamos además de que tenemos un montón de cameos que nos hacen sentir como en casa.
Ver a Solas en las primeras misiones me hizo sentir bastante cómodo, la realidad aquí es que el juego tiene un excelente gameplay aunque prescinde de algo que para mi es más que importante y es la parte táctica. Recuerdo como en Dragon Age: Inquisition no debías solamente pensar en ti sino que también debes mejorar a tus aliados para que te puedan dar esa experiencia definitiva pero en The Veilguard es todo lo contrario.
Y la realidad es que tenemos apariciones de mucho peso como Morrigan de Inquisition y Origins, The Inquisitor, entre otros. Conectar las franquicias entre sí era algo bastante necesario pero hacer que estos personajes se unieran a esta entrega es algo vergonzoso. Hablando sobre el elefante en la sala si, The Veilguard tiene varias cosas que hacen a uno enojarse de una mala manera y la principal de todas estas es la inclusión forzada.
Esa parte en donde sin importar el tipo de conversación que tengas terminaras diciendo que eres trans realmente me saca de tono. No por el tema fóbico y vamos a ser claros, es que simplemente no veo la necesidad alguna de agregar este tipo de contenido a un juego de fantasías en los que tu objetivo es ser el mejor en lo que haces jugando tu clase preferida y nada más.
Juegos como Life is Strange, en donde eres un personaje con este tipo si puedo aceptarlo pero no en un juego en donde el género sea algo que defina algo importante en el juego pero lo mejor de todo esto es que sigue siendo el mismo juego con o sin ello. No veo ningún tipo de ventaja tener que complicarse tanto la vida al jugador llevándote al límite para experimentar esto.
La creación de personaje es muy balanceada pero lo que más me llama la atención es que debemos tomarnos un tiempo para elegir nuestra clase (según nuestro estilo de juego) además de que debemos tener en cuenta la facción que queremos elegir y debemos elegir entre estas seis. Como un nuevo héroe que llevamos por nombre “Rook”, lo importante aquí es que esta facción determina una parte importante de la historia y es en cómo conocimos a nuestros compañeros y cosas así por el estilo.
Cada facción te permitirá usar un tipo de atuendo en especial en las cinemáticas, esto para darle cierto tipo de tono al asunto y en cada una de estas pude ver realmente el trabajo visual que el juego tiene. No nos podemos confundir en cuanto a esto, el juego tiene un apartado visual bastante bueno pero carece de cierto realismo ya que sus creadores decidieron hacerlo más fantasía de lo que es.
Los diálogos no son lo mejor del otro mundo y a veces es mejor evitarlos para continuar con la historia. Personalmente yo le dedicaba cierto tiempo a escuchar cada conversación e incluso desarrollar la historia de tu compañero de viaje en el juego. Al que muchos criticaron es un vivo ejemplo, Cyberpunk 2077 tiene uno de los mejores diálogos y profundidad de historia en sus personajes secundarios que hasta los mensajes les leía pero en The Veilguard es todo lo contrario, se vuelve aburrido e incluso repetitivo.
La toma de decisiones parece algo interesante y ayuda mucho a apoyar esa narrativa en el juego. Nos ayuda a crear nuestra propia historia aunque las respuestas sean guiadas conforme a nuestro comportamiento. Esos mensajes de que este personaje recordará más adelante tu decisión o que estará en desacuerdo/acuerdo contigo es bastante llamativo pero el juego realmente no tiene eso. Sin importar la decisión o respuesta final que tomemos pareciera que el juego debe tener un rumbo guiado para que todo suceda de la forma que debe ser.
El gameplay es bien fluido y contando que jugué las anteriores Dragon Age en consola ahora el salto a PC no es para nada mal. Los keybinds y efectos de combate son bastante buenos. La fluidez a la hora de jugar dependerá mucho de que tanto configuremos nuestros gráficos y aunque mi PC tiene una buena potencia, se podría sentir una ligera falta de optimización. Como es un juego de un solo jugador, no necesitamos tantos FPS pero si necesitamos que sean estables dentro de lo posible para que la experiencia visual sea firme y que esos ataques o enfrentamientos tengan un valor diferente.
No puedo decir que el juego esta mal configurado o que se inclina mucho al apartado gráfico pero aunque en muchos momentos pude tener unos gráficos estables si llegue a experimentar algunos bajones repentinos por solo llegar a algunas áreas que realmente no tenía porque estar asi. Por encima de todo se considera jugable aunque con ciertas cosas que debemos tener pendiente.
La PC utilizada para este review fue la siguiente:
Visualmente hablando el juego está más surrealista incluso al crear tu clase de Humano, no pareces tan humano. Todo es como sacado de un libro abstracto donde el realismo se quedó atrás. Los personajes parecen más una ilustración o un simple dibujo que un diseño de personajes actuales, es una mezcla un poco incómoda de ver e intentar adaptarse en donde no solamente el juego carece de muchas cosas sino que nos pone a adaptarnos involuntariamente a algo que personalmente se ve horrendo.
Unas buenas horas de juego, nos permitirá adaptarnos un poco a este nuevo sistema pero para mi en lo personal prefiero quedarme con la experiencia de Inquisition (que incluso volví a descargar). The Veil Guard es como Joker: Folie à Deux, un juego que debió tomarse más tiempo en salir y no arruinar por completo lo que ya teníamos en nuestra mente o probablemente no debió existir.
En conclusion
Dragon Age: The Veilguard no le rinde homenaje en lo absoluto a sus antecesores y para mí entra en la lista de los peores en su género además de toda la franquicia. Deja mucho que desear con tanto potencial y uno de los fuerces más grande en cuanto a inclusión. Realmente hubiésemos aprovechado ese asombroso gameplay si lo tuviésemos hace muchos años pero el afán de hacerlo más adecuado a esta generación lo pone en un lugar incómodo de aceptar e incluso pensar que debemos esperar muchisimo tiempo mas para un nuevo Dragon Age. Visualmente es una experiencia bastante grata aunque en cuanto al rendimiento tendremos que ir visitando cada una de las configuraciones para obtener un rendimiento más decente. Por encima de todo, lo considero jugable si realmente no te interesan mucho las narrativas o conocer la historia más a fondo. Este review fue realizado en PC con una Radeon RX 7700 XT OC.