Hace algunos años, se acusaba a la mítica Konami de haberse olvidado de lo que la hizo estar en el mapa mundial, los videojuegos. Sin embargo, eso ha estado cambiando recientemente con la editora lanzando recopilaciones de sus juegos más icónicos como Teenage Mutant Ninja Turtles: The Cowabunga Collection y más recientemente Metal Gear Solid: Master Collection Vol. 1. Ahora, Konami ha hecho de editor con una nueva IP en asociación con Second Impact Games, creando a Super Crazy Rhythm Castle un simpático juego que mezcla música, ritmo, juego cooperativo y rompecabezas alocados.
Derrocando al rey del ritmo
En Super Crazy Rhythm Castle seguimos a un grupo de extraños personajes que se enfrentan a un gobernante llamado Rey Ferdinand. Ferdinand, ha estado gobernando el reino con mano de hierro y desmoralizando a los habitantes a través de largos discursos. Así que nuestro grupo de héroes debe devolver el orden del mundo rítmico, no sin antes pasar por una serie de retos que nos impone el rey antes de llegar al trono y tener un enfrentamiento final.
Como suele ser el caso en este tipo de juegos, la historia es una mera excusa para tener algo de contexto dentro del juego. Aunque, se conecta muy bien con el diseño de niveles y está cargada de humor, a veces absurdo. Pero no esperemos grandes giros de guion ni nada parecido, lo que sí podemos esperar es que parece más un episodio de caricatura de sábado por la mañana.
¿Sientes eso? Es música
Básicamente, Super Crazy Rhythm Castle es un juego de ritmo tradicional, pero con un giro, los niveles van cambiando las reglas en tiempo real. En cada nivel, debemos tocar una canción distinta mediante un panel que se divide en secciones en las que irán pasando unas notas y debemos tocarlas en el momento justo. Además, el juego cuenta con dos niveles de dificultad en la que tenemos tres secciones en el panel y cuatro en la dificultad más alta.
Lo interesante aquí es que no solo será tocar los botones en el momento preciso, los niveles cambian los objetivos en plena canción. Por ejemplo, el escenario se puede llenar de obstáculos que detienen la canción, y será nuestro deber limpiar el desorden para continuar. En otro nos enfrentamos a un jefe en el que debemos llenar un cañón tocando correctamente para luego atacar y reducir su salud. Lo interesante es que cada nivel tiene reglas diferentes y siempre nos mantiene pendientes.
Sin embargo, no todos los niveles serán divertidos, ya sea que no tengamos claro el objetivo o que resulte muy cuesta arriba cumplir la tarea. En ocasiones debemos dividir nuestra atención en fallar lo menos posible y tener que cumplir con el objetivo secundario que rompe el ritmo de la canción. Por otro lado, para llegar a cada nivel debemos recorrer un mapa por medio de caminos establecidos, sin embargo, en muchas ocasiones debemos conseguir algún objeto para desbloquear caminos y poder avanzar por los niveles.
El juego tiene un componente multijugador que mejora la experiencia y facilita algunos de los niveles más complicados. Podemos jugar hasta con tres amigos más para desatar el caos. Jugar en solitario se hará cuesta arriba sobre todo en los niveles que debemos estar pendientes de varias cosas a la ve.
Musicalmente bonito
Visualmente, Super Crazy Rhythm Castle tiene un apartado artístico que mezcla gráficos con entornos en 3D y personajes en 2D. Pudimos probar el juego en Nintendo Switch y eEn modo portátil, se pierden algunos detalles que se distinguen mejor en modo Dock, por lo que es la mejor forma de jugarlo.
En cuanto a su apartado sonoro, como era de esperarse, el juego destaca por sus canciones, muchas de ellas pegadizas y hasta originales. De hecho, me hizo ir a investigar para escucharlas de manera ininterrumpida más tarde.
Veredicto
Super Crazy Rhythm Castle es un juego de ritmo musical único que nos lleva a realizar tareas alocadas mientras la música sigue corriendo, además de resolver algunos acertijos. A nivel de historia es solo un mero hilo conductor, ya que los personajes no sobresalen ni la trama en sí. La parte divertida son los niveles y las canciones que poseen cada uno. No solo es tocar correctamente, sino realizar las tareas más locas que al rey se les ocurran. Aunque es divertido, algunas secciones se sienten injustas y otras rompen el ritmo. Las cosas mejoras cuando jugamos con varios amigos porque se facilitan las tareas.
Nota: Este review fue realizado para Nintendo Switch gracias a la copia para revisión cedida por Konami.