Sony PlayStation anunció a principios de diciembre de 2023 que eliminaría todo el contenido de Discovery de sus tiendas digitales. La decisión provocó una gran indignación entre los usuarios, que se quejaron de que era una práctica anticompetitiva y una violación de sus derechos de propiedad.
La compañía argumentó que la decisión se debía a que su acuerdo de licencia con Discovery expiraba el 31 de diciembre de 2023. Sin embargo, los usuarios no aceptaron esta explicación y acusaron a PlayStation de querer obligarlos a suscribirse a su servicio de streaming.
Tras la presión de los usuarios, PlayStation anunció el 20 de diciembre que había llegado a un acuerdo con Warner Bros., propietaria de Discovery. El nuevo acuerdo permitirá a los usuarios seguir accediendo a su contenido de Discovery comprado en PlayStation Store durante al menos los próximos 30 meses.
La decisión de PlayStation es un importante giro de los acontecimientos. Es una señal de que la compañía está escuchando las quejas de sus usuarios y está dispuesta a hacer cambios para satisfacer sus necesidades.
Este caso es un ejemplo de cómo los usuarios pueden ejercer su poder para influir en las decisiones de las empresas. Los usuarios deben estar atentos a las prácticas de las empresas y denunciarlas cuando sean injustas o abusivas.