MrBeast aparentemente tiene un “clon” para que pueda estar en “múltiples lugares a la vez” y ser mucho mas exitoso.
En el fondo, estoy seguro de que en algún momento todos deseamos un clon. Quiero decir, serían útiles para asistir a reuniones aburridas, reuniones familiares o para ser el comienzo de una legión para conquistar el mundo,
Aunque al decir eso, si tuviéramos clones para conquistar el mundo, seguramente se apoderarían de nuestras vidas y se harían amigos de nuestros seres queridos.
Nombre real Jimmy Donaldson, MrBeast es una de las personalidades más trabajadoras en las redes sociales con 137 millones de suscriptores en YouTube, así como 19 millones de seguidores en Twitter y 24 millones en Instagram.
Acusan a MrBeast de ganar dinero con obras de caridad falsas y este se defiende
Con un valor reportado de $ 500 millones, MrBeast ha hecho la gran mayoría de su fortuna organizando eventos de caridad masivos, así como concursos inspirados en Squid Game. Recientemente, MrBeast le dio a 20,000 niños en África su primer par de zapatos, aunque pronto recibió fuertes críticas por hacerlo.
Entonces, ¿cómo diablos MrBeast se mantiene al día con todo? Al tener un clon, aparentemente. Bueno, técnicamente, MrBeast no ha creado un clon real, más bien ha entrenado a personas para que sean su “clon”.
Según lo informado por UNILAD, para mantenerse al día con las altas exigencias de la vida que lleva, MrBeast ha capacitado a personas que comparten su misma visión y las somete a capacitación, lo que él llama ‘clonación’. Lo siento, no es tan dramático como pensábamos.
Durante una entrevista con Lex Fridman, MrBeast explicó: “Tengo muchas personas en la empresa que pueden pensar como yo y básicamente tomar decisiones como las que yo tomaría”.
“Un ejemplo es Tyler [Conklin]. Básicamente, durante cuatro o cinco años pasamos una cantidad absurda de tiempo juntos y trabajamos juntos en cada video… y lo mismo con mi director ejecutivo James, vivió conmigo durante un par de años.
“Soy un gran admirador de encontrar personas que estén súper obsesionadas y que realmente solo quieran ser geniales, y luego descarguen todo lo que tengo en ellas.
“Durante dos años, [James] vivió conmigo y probablemente hablamos, en promedio durante esos dos años, siete horas al día… realmente, entrenando su cerebro para pensar como yo”, agrega. “De esa manera, podría hacer cosas sin mi opinión, sin que yo tenga que vigilarlo constantemente o darle consejos.
“Entonces, durante los primeros seis meses, no hizo nada. Simplemente me estudió y estudió todo lo que me importaba y cómo hablaba. Durante los siguientes seis meses, comenzó a asumir algunas responsabilidades y ahora solo puede dirigir la empresa y nunca tengo que controlarlo”.
