Valve ha publicado una nueva actualización para Counter-Strike: Global Offensive que aborda el escándalo de los entrenadores que sacudió la escena profesional del juego el año pasado.
Mariusz “Loord” Cybulski, entrenador del equipo Wisła Kraków de Counter-Strike: Global Offensive del Wisła Kraków, reveló públicamente el 26 de agosto un exploit del juego. En él se permitía al espectador ver las partidas con las paredes recortadas. Esto le da al jugador una visión mucho más completa del mapa.
Se descubrió que algunos entrenadores habían utilizado este fallo para observar los movimientos y las posiciones de los oponentes. Posteriormente transmitían esta información a sus equipos.
En un parche del 27 de mayo se dice que “las posiciones de los entrenadores se guardan ahora en los archivos de copia de seguridad de las rondas”. Esto significa que el movimiento de los espectadores de un entrenador a lo largo del mapa será rastreado y registrado.
Los revisores también podrán ver las demostraciones desde el punto de vista de un entrenador para determinar si estaban haciendo algo sospechoso.
Además el tuit de Cybulski provocó una onda expansiva en la escena profesional de Counter-Strike:GO, cuyas repercusiones todavía se están tratando.
Finalmente Valve se apresuró a arreglar el fallo de la cámara el mismo día que Cybulski lo reveló, mientras las organizaciones deportivas se apresuraban a determinar cuántas personas habían utilizado el fallo y cuántas partidas se habían visto afectadas por él.
La Comisión de Integridad de los Esports ofreció un periodo de confesión a los tramposos que se escondían mientras repartía la primera oleada de prohibiciones.
Tras revisar más de 19.000 demos, 37 entrenadores fueron suspendidos entre 6 y 15 meses. La investigación del ESIC sigue en curso.