Últimamente, nos estamos acostumbrando a relacionar los logros de las máquinas con los avances en inteligencia artificial. En los videojuegos, no solo se está utilizando para, por ejemplo, hacer avanzar la acción, sino que incluso se están probando herramientas de IA que pretenden imitar a un jugador.
Es ese afán de imitación lo que ha hecho avanzar el desarrollo de la inteligencia artificial. Recordemos que esta disciplina surge del genio del matemático Alan Turing, que se propuso desarrollar máquinas que fueran capaces de “pensar” o “actuar” como los humanos.
Sin embargo, en las ciencias de la computación, la inteligencia humana no es el único fenómeno que se ha pretendido imitar.
Uno de los grandes misterios de la Naturaleza, que durante siglos ha fascinado a científicos y humanistas, es la aleatoriedad. De forma natural, se producen muchos fenómenos que son difíciles de predecir.
Esta aleatoriedad está en la base de muchos juegos, siendo el ejemplo más clásico el del lanzamiento de dados. Prácticamente, todos los juegos de casino tienen un importante componente aleatorio; de hecho, alguno de ellos, como la ruleta, es fruto de la investigación científica y esa obsesión por entender la aleatoriedad.
La ruleta es un buen ejemplo de lo importante que es la aleatoriedad en el juego; si supiéramos realmente qué número va a aparecer, perdería toda su esencia. En una ruleta de casino tradicional, esa aleatoriedad se produce de manera natural, pero ¿qué pasa cuando se quiere reproducir esta actividad de manera digital?
Desde hace años, el casino online ha sido un campo de experimentación en el que se han ido perfeccionando los esfuerzos por reproducir digitalmente ese factor aleatorio tan importante en el juego. No solo por la ruleta; hay otros juegos que también se fundamentan en este factor, como los tragamonedas online. Las combinaciones ganadoras de un Slot deben ser tan impredecibles como las del juego tradicional, más todavía cuando estos juegos tienen botes de premio que se ganan ya no solo en un juego concreto, sino entre una red de slots (jackpots progresivos).
Para los juegos de casino, es fácil entender por qué es importante ser capaz de recrear eventos fortuitos virtualmente. Pero también lo es para los videojuegos.
En muchos juegos, por ejemplo, se utilizan técnicas similares a las del casino online para programar eventos que tienen que ser azarosos. Un ejemplo fácil es el Tetris, donde los bloques deben aparecer de manera impredecible. Pero también hay otros fenómenos más complejos; por ejemplo, en CS:GO, se usan estas técnicas para determinar cómo impactan las balas sobre los objetivos o, en DOTA 2, cómo afectan determinadas habilidades a los rivales.
Estas técnicas se basan principalmente en los generadores de números aleatorios.
Cómo funciona un Random Number Generator (RNG)
En matemáticas, hay una rama llamada Teoría de la Probabilidad que se desarrolló a partir del trabajo de pensadores como Blaise Pascal, a quien se le atribuye la invención de la Pascalina, la primera calculadora mecánica, pero también de la ruleta de casino.
Esta rama de las matemáticas tiene múltiples aplicaciones y ha proporcionado grandes herramientas como el método o la simulación Montecarlo, que estima los resultados de un suceso incierto y que fue clave en los experimentos del protagonista del fenómeno Oppenheimer.
El desarrollo de los RNG también bebe de la Teoría de la Probabilidad, pero su objetivo es totalmente opuesto al del método Montecarlo. Ante una situación de probabilidad múltiple, lo que intenta, en lugar de encontrar patrones que ayuden a predecir el resultado más probable, es romper esos patrones e introducir un elemento distorsionador que haga imposible predecir qué va a suceder.
Para conseguir reproducir la aleatoriedad en un entorno digital, se utiliza no solo software, sino también hardware. Principalmente, hay dos tipos de RNG.
Pseudo-RNG
Es un software que se basa en algoritmos que imitan la aleatoriedad. Utilizan grandes bases de datos y múltiples combinaciones que hacen que sea muy difícil determinar la probabilidad de que se produzca un evento. El software que se utiliza en la industria del juego recibe extensivas auditorías externas, pero, aun así, se considera “pseudo” aleatoriedad, ya que depende íntegramente de operaciones matemáticas.
RNG con hardware o RNG verdaderos
En este tipo de RNG se introducen elementos aleatorios no programados, es decir, que realmente son aleatorios por naturaleza. Al software del RNG se le integran inputs de fenómenos verdaderamente imprevistos que dependen, por ejemplo, de las condiciones ambientales o el comportamiento del jugador. Algunos de estos inputs son los reflejos del sol sobre un espejo, movimientos del ratón o lanzamientos reales de monedas y dados. Estos actos aleatorios se identifican con determinadas acciones y, cuando se producen, se traducen en esa acción.
