Tras anunciar el aumento de Xbox Game Pass Ultimate a $29.99 mensuales, Microsoft ha eliminado silenciosamente uno de sus beneficios más valorados, el 10% de descuento en contenido adicional (DLC) y monedas virtuales como los COD Points de Call of Duty.
Antes, los suscriptores podían ahorrar en expansiones como Shattered Space de Starfield, el DLC de Indiana Jones o los paquetes de Forza Horizon 5. Ahora, todo se paga a precio completo, como si no tuvieras suscripción. Microsoft no lo anunció oficialmente, pero los jugadores lo notaron rápido y como era de esperarse no lo tomaron bien.
La compañía intenta compensar con su nuevo sistema de recompensas, donde en lugar de descuentos directos, los usuarios reciben puntos que pueden canjear en la tienda. Pero el cambio no convence, lo que antes era ahorro inmediato, ahora es una promesa futura que depende de cuánto juegues y cuánto gastes.
Parece ser que el Game Pass se ha convertido en un servicio donde se pagará más para recibir menos. Microsoft acaba de hacer que el «Ultimate» se sienta menos definitivo. Cuando beneficios como este desaparecen justo después de subir el precio, se pierde algo más que dinero, la confianza.