Microsoft está moviendo fichas importantes dentro de Xbox, y es que la compañía acaba de abrir dos vacantes clave, busca líderes financieros que no solo entiendan los números, sino que impulsen una transformación urgente en el modelo de negocio de sus estudios de videojuegos. La meta es unificar procesos, mejorar rentabilidad y alinear todas las divisiones bajo una misma estrategia.
A pesar de que Xbox reportó ingresos récord de $23 mil millones en el año fiscal 2025, la rentabilidad sigue siendo un punto débil. Tras la compra de Activision Blizzard por $68 mil millones, la presión por justificar esa inversión se sigue sintiendo dentro del ecosistema Xbox. Y ahora, los ejecutivos están ansiosos, quieren resultados y rápido.
Entre los cambios en marcha, se encuentra, la integración de anuncios en juegos vía streaming, consolas de próxima generación con compatibilidad nativa para Steam, y el uso de IA generativa para acelerar el desarrollo. Todo esto apunta a una reestructuración profunda, donde cada estudio—desde ZeniMax hasta King—debe alinearse con una nueva visión financiera.
En redes, la reacción fue inmediata: “Van a monetizar hasta el botón de encendido”, “Game Pass ya no es sostenible”, “Se viene el modelo con comerciales antes de jugar”.
La crisis en Xbox se complica, si están necesitando asesoramiento externo de forma urgente, habrá que estar pendiente del futuro de la compañía de cara a los próximos meses.