Contrario a lo que muchos piensan, los MMORPG no están muertos, World of Warcraft, con 20 años a cuestas, lo demuestra con su última expansión, Dragonflight, que ha logrado superar el número de suscriptores que tenía al momento de su lanzamiento.
John Hight, gerente general de Warcraft, explica que el éxito de Dragonflight se debe a varios factores. Primero, la expansión en sí misma ha sido bien recibida por la comunidad, corrigiendo muchos de los errores de Shadowlands. Segundo, Blizzard ha tomado medidas para mantener a los jugadores comprometidos, como compartir hojas de ruta de contenido y aumentar la frecuencia de actualizaciones.
Sin embargo, el camino no ha sido fácil. Shadowlands, la expansión anterior, fue un fracaso que llevó a una pérdida significativa de jugadores. Blizzard tuvo que escuchar las críticas de la comunidad y trabajar duro para recuperar la confianza perdida.
Blizzard no ha dado un número exacto de suscriptores, pero un creador de contenido cree tener una cifra bastante aproximada. Bellular Warcraft compartió un video durante el fin de semana que hacía referencia cruzada con el último número real de suscriptores que informó Blizzard (en Legion) con otros cambios financieros revelados y el gráfico de Hight. Las estimaciones de Bellular sitúan el número actual de suscriptores de World of Warcraft en aproximadamente 7,25 millones, después de haber alcanzado un mínimo de 4,07 millones durante Battle for Azeroth y 4,5 millones durante Shadowlands. Y es especialmente impresionante dado que el juego alcanzó su punto máximo en 2010 con 12 millones de suscriptores durante Wrath of the Lich King.
El éxito de Dragonflight es un hito importante para World of Warcraft. Demuestra que, incluso después de 20 años, el juego aún tiene la capacidad de reinventarse y atraer a nuevos jugadores. Es un fénix que ha resurgido de las cenizas, y su futuro parece prometedor.
