Una tendencia que hemos estado presenciando en el mundo de los videojuegos, es que las damiselas en desgracias que antes eran secuestradas, ahora son las que toman el protagonismo del que antes carecían. Lo vimos recientemente con Princess Peach: Showtime!, y ahora toca el turno a Zelda en The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom.
El giro de tuerca aquí es que por primera vez, un juego de la franquicia estará protagonizado por la heroína que da nombre al título… Todavía hay quien piensa que Link se llama Zelda. Se podría decir que el juego es una mezcla de la libertad de BOTW y TOFK, con la estética de A link to the Past conservando todo el encanto de la serie durante sus casi 40 años de existencia.
Empezando por el final
En The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom, el juego inicia en lo que sería el final del mismo si estuviera protagonizado por Link. En un enfrentamiento final contra Ganon, este tiene a la Princesa Zelda atrapada dentro de un cristal y tras ser derrotado por Link, una extraña grieta emana del suelo y engulle a nuestro valeroso héroe verde, no sin antes disparar una flecha al cristal donde se encuentra Zelda atrapada y quede liberada.
Al salir de la mazmorra, pronto Zelda se da cuenta de que esas grietas se han extendido por todo el reino y han atrapado a algunos ciudadanos, incluso pueblos enteros. Tras una serie de acontecimientos, nuestra princesa, se ve obligada a asumir las riendas del heroísmo con tal de salvar a esta nueva versión de Hyrule y se alía a un ser llamado Tri (Supongo que por Trifuerza) que la guiará en su periplo.
Cerrando brechas
Echoes of Wisdom introduce algunos cambios jugables respecto a entregas protagonizadas por Link. En vez de una espada, escudo, arco/flecha, bombas, boomerang, etc. Zelda en su lugar, utiliza un bastón mágico con varias habilidades muy útiles, siendo una de ellas y la principal, copiar cualquier objeto o enemigo dentro del juego. Claro, la habilidades del héroe de verde, no quedan totalmente relegadas, pero de eso hablemos más adelante.
Copiar objetos permite sortear obstáculos, llegar a sitios altos, crear puentes, y sobre todo, resolver acertijos. Además, otra habilidad que otorga Tri es la de mover objetos mediante telepatía y sirve también para algunas batallas contra jefes. Resolver puzzles nos deja a nuestro criterio como hacerlo, sin un orden establecido, de aquí la comparación con los últimos juegos principales. Cada objeto u enemigo, requiere de un número determinado de un fragmento de la cola de Tri, la cual se puede aumentar a medida que avanzamos en la aventura.
De su parte, copiar enemigos sirve para defendernos o que nos defiendan. Todos los enemigos tras ser derrotados, son pasibles de copiarse y utilizarlos en batalla. Pero aquí, se pueden utilizar los enemigos de manera inteligente, por ejemplo un enemigo débil al fuego, pues invocamos a un enemigo de fuego para derrotarlo más fácilmente. Además, se utilizan para resolver algunos acertijos o llegar a cofres que están fuera de nuestro alcance. Lo bueno es que no se nos limita en absoluto.
Sin embargo, este no es el único medio que tiene Zelda para defenderse, también podemos convertirnos en el propio Link, con espada y escudo en mano. Este sistema es limitado y para ello, debemos recoger unos orbes para que el efecto dure, con la adición de subir de nivel esta habilidad para que dure mucho más. Sin embargo, es el sistema de juego de toda la vida de la serie, y básicamente, lo estaremos utilizando con jefes de nivel más que nada.
Aunque rara vez, los juegos de The Legend of Zelda tienen fallos, aquí hay uno muy notorio. Cada vez que copiemos un objeto u enemigo, se irá agregando a un listado. El problema aquí es que ese listado se va haciendo más y más grande, y seleccionar el objeto que necesitamos se convertirá en una pausa prolongada por el menú ya que no tiene una rueda de objeto rápido. Esto rompe el ritmo del juego, cuando tenemos que seleccionar aquel objeto que nos servirá pero que tenemos rato sin utilizar y debemos buscarlo en el menú.
El diseño de niveles se siente muy clásico pero se nos deja elegir cual hacer primero. En algunas tendremos secciones en 2D, que no son muy largas pero aporta variedad a la fórmula. Y conserva el encanto de resolverlas cuando adquirimos alguna nueva habilidad y tenemos que echar mano del backtracking habitual de la serie.
The Legend of Link
Parece ser que el estilo de diorama interactivo está muy de moda estos días. Así es como se ha concebido The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom. Es un juego muy bonito en vista cenital que recuerda a los títulos de la SNES y GBA, sin embargo, tiene los problemas habituales de los últimos juegos de Nintendo Switch. Tiene ralentizaciones constantes, aunque en modo portátil no se notan.
En cuanto a su banda sonora, no se queda atrás, tenemos algunas de las típicas melodías conocidas, otras reinterpretadas y otras nuevas como Hyrule Field Theme que tiene cierto toque a la icónica The Overworld Theme de los juegos de NES y SNES. De este apartado, no puede haber queja alguna.
Veredicto
The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom es un juego que engaña por su estética, pero no nos dejemos engañar. Tiene todo aquello que hace que amemos los juegos de la franquicia, desde la vista cenital, resolución de acertijos ingeniosa, libertad para resolver los problemas, nuevas mecánicas de combate, etc. Mezcla el sabor a clásicos con algunos toques modernos de manera magistral. Es un juego precioso, aunque con algunos errores técnicos habituales, pero que no empañan la aventura.
Nota: Este review fue realizado gracias a la copia cedida por Nintendo.