La estrategia de Bandai Namco de traernos todos los juegos posibles de la franquicia Tales of remasterizados, va muy en serio. Ya tuvimos a Tales of Graces f Remastered, y hace unos meses, fue anunciado Tales of Xillia Remastered, uno de los más solicitados por los fans. Ahora que lo tenemos entre nosotros, la pregunta sería cuando saldrá la segunda entrega, que es igual de buena que el juego que nos ocupa.
Esta remasterización no solo trae mejoras visuales, como es de esperar, también adapta la experiencia con ajustes modernos. El juego destaca por su historia encantadora, dos protagonistas con puntos de vistas distintos, personajes entrañables y un sistema de combate de ritmo rápido.
Dos caminos, un mismo destino


Tales of Xillia se desarrolla en el mundo de Riese Maxia, una tierra regida por los espíritus, los cuales tienen una relación de coexistencia con los humanos. Aquí vive Jude Mathis, un joven estudiante de medicina en la academia de la ciudad de Fennmont quien está investigando una serie de pacientes a quienes las Artes les han fallado por culpa de los espíritus.
De su parte, Milla Maxwell, el avatar del dios de los espíritus, ha realizado un viaje a la ciudad de Fennmont para poner fin a un arma que está en desarrollo que puede sumir el planeta en el caos. Sin embargo, tras una serie de acontecimientos, Milla se une a Jude luego de haber sido despojada del control de las cuatro grandes deidades: Agua, Viento, Fuego y Tierra iniciando así una aventura que pondrá al riese Maxia de cabeza.


Xillia presenta dos historias entrelazadas, tanto jugable como argumentalmente: La de Milla y la de Jude, pudiendo elegir una de las dos al inicio del juego. Ambas historias convergen la mayor parte del tiempo pero, en ciertos tramos se separarán dando a la trama puntos de vistas diferentes. Ambos personajes son polos opuestos, mientras que Jude es más comedido, Milla es más arrojada por su condición de deidad.
En líneas generales, es una historia emocional y profunda que se va develando a medida que avanza la trama. Aunque los personajes siguen los típicos tropos de estas producciones, resultan entrañables, graciosos y bien construidos. Sus motivaciones están claras, destacando sobre todo el villano de esta entrega, Gaius.
Como el agua y el aceite


Xillia mantiene el esquema de exploración y visita de pueblos, con combates por el camino. En cada pueblo encontraremos lo típico de siempre desde tiendas, posadas, personajes con misiones secundarias y las principales que hacen avanzar la historia. Realmente, en este apartado el juego es algo anodino ya que se siente muy lineal y apenas hay espacio para una que otra bifurcación en el camino, impulsado por los puntos de vistas del personaje que hayamos elegido.
Como dije, al inicio del juego tenemos que elegir al protagonista, ya sea Jude o Milla y esto repercute en la forma de las peleas. Siendo que Jude utiliza ataques de artes marciales, mientras que Milla hace uso de los poderes de los elementos con el sistema denominado Dual Raid Linear Motion Battle System. Aunque elijamos a cualquiera de los dos, podemos cambiar entre cada uno de los cuatro miembros que participan en las peleas, cada uno con su propio set de movimientos. Los ataques se rigen por un número determinado que se reduce a medida que hacemos un movimiento, pero que si el golpe es un crítico, es posible conservar el ataque para unos combos devastadores.


Aquí se introdujo un sistema de enlace en el que dos personajes se vinculan y se apoya tanto defensiva como ofensivamente, dando así una amplia gama de posibilidades. Con esta mecánica es posible realizar los Artes Vinculados, que consiste en que artes comunes se transformen en otros nuevos mucho más devastadores. Sin embargo, esto se realiza mediante una barra adicional que se llena con cada ataque para que así no abusemos del derecho.
Cada personaje cuenta con árbol de habilidad que se agranda a medida que invertimos puntos en ellos. Se puede mejorar el ataque, la salud, la defensa, el ataque mágico, entre otras cuestiones. Sin embargo, si conectamos varios puntos, desbloquemos nuevos movimientos, lo que motiva al jugador a estar pendiente de la adquisición de estos puntos de mejora. Eso, y las características particulares de cada personaje, dotan al juego de un sistema, que, aunque parece complejo, es bastante gratificante si lo dominamos.
La mejor versión de Xillia


Tal como Graces f, este remaster viene con mejoras notables como ajustes en la jugabilidad, guardado automático, muestra de íconos de misión, posibilidad de desactivar los combates, entre otros. También, incluye contenido descargable de la versión original, con trajes para los personajes, objetos extra y otros extras especiales para los fans.
Sin embargo, la adición más relevante es la de acceder a la Tienda de Grado desde el inicio del juego sin tener que finalizarlo una primera vez. Aunque esto es opcional, debo decir que algunos ajustes pueden romper el juego como Ataque x2, más probabilidad de crítico en las peleas, y ganar experiencia x2 y x5. Todo depende de lo que queramos como jugadores.


Gráficamente, aunque el juego tiene algunas mejoras notables como texturas más suavizadas y estilizadas, 60fps y resoluciones a 4K. Sin embargo, el juego hereda algunos problemas como animaciones acartonadas, texturas que apenas se tocaron y algunos NPC con pocas animaciones. También se nota un uso muy obvio de reescalado por IA, algo que desluce el resultado.
En cuanto a la banda sonora, no hay queja alguna. De nuevo bajo la dirección de Motoi Sakuraba. El juego viene doblado al inglés y japonés, y por primera vez, con subtítulos al español.
Veredicto
Tales of Xillia Remastered demuestra por qué es uno de los títulos más queridos dentro de la saga Tales of, y ahora en su mejor versión. Entre su historia bien escrita, dos tramas conectadas y su sistema de combate dinámico y fluido, lo convierten en uno de los mejores de la franquicia. Las mejoras introducidas actualizan el programa sin alterar la esencia del original. La posibilidad de elegir entre Jude o Milla sigue siendo uno de los elementos más destacados y que aporta a la rejugabilidad. Aun así, esta remasterización no está exenta de algunos fallos puntuales. Aunque tiene mayor resolución y otras mejoras, se notan algunos aspectos técnicos que no han envejecido del todo bien, como animaciones rígidas, entornos con poca vida e implementación de IA muy evidente para el reescalado. Aun así, este remaster es uno imprescindible para los amantes del género.
Nota: Este review fue realizado en PS5 y el código fue cedido gracias a Bandai Namco.
