La acción de Take-Two Interactive, la empresa matriz de Rockstar Games, se ha desplomado aproximadamente un 10% tras confirmarse la segunda demora oficial de Grand Theft Auto VI.
El título, enormemente anticipado, pasa de su fecha de lanzamiento del 26 de mayo de 2026 al 19 de noviembre de 2026, lo que ha generado una evidente frustración en Wall Street.
La reacción de los inversores fue inmediata y severa, las acciones de Take-Two cayeron en picado en el comercio extrabursátil, llegando a perder cerca de 30 dólares por acción, este desplome refleja una creciente preocupación en el mercado sobre la capacidad de la compañía para cumplir con sus calendarios anunciados para lo que es, sin duda, el lanzamiento más importante en la historia de los videojuegos.
Frente al pánico financiero, el CEO Strauss Zelnick ha mantenido un mensaje unificador y repetitivo, en todas sus entrevistas, Zelnick ha expresado estar «altamente confiado» en la nueva fecha y ha justificado la decisión argumentando que el tiempo extra se destinará a dar a GTA VI el «nivel de pulido» que los fanáticos merecen y esperan, asegura que, en retrospectiva, nunca se han arrepentido de retrasar un juego cuando era necesario.
Take-Two stock has crashed 10% following the GTA 6 delay, as investors begin to lose trust and CEO Strauss Zelnick keeps repeating the same words, saying he’s “confident” about the release date in every interview. pic.twitter.com/MlOepzn2BV
— GTA 6 Countdown ⏳ (@GTAVI_Countdown) November 7, 2025
A pesar del batacazo bursátil, Take-Two intenta calmar a los accionistas con perspectivas financieras sólidas, la compañía incluso ha elevado su previsión de ventas anuales, situándola ahora entre 6.380 y 6.480 millones de dólares, el mercado ahora observa si la confianza repetitiva de Zelnick se traduce en un lanzamiento sin contratiempos y en la recuperación de la confianza inversora para finales de 2026.