Otra de las franquicias que Square Enix posee es la serie SaGa, la cual ha existido desde 1989 con Game Boy. Recientemente, hemos analizado dos juegos de la serie, Romancing SaGa 2 y Romancing SaGa 3, que dieron el salto de Super Nes a consolas acutales.
De cualquier manera, si hay algo que se puede decir sobre la serie es que se ha mantenido poco convencional desde su inicio, lo que la convierte en una franquicia bastante divisiva, ya que los jugadores que buscan algo único han encontrado mucho amor al respecto. Con SaGa: Scarlet Grace – Ambitions, se puede decir el mismo tipo de cosas.
Como todos los juegos de SaGa, no hay un solo protagonista, SaGa: Scarlet Grace – Ambitions cuenta la historia de cuatro héroes: Leonard, Urpina, Balmaint y Taria. Como es costumbre hay una historia principal en la que el mundo está en conflicto después de que el Firebringer ahora asesinado causó la aparición de monstruos y las naciones se dividieron.
La narración se cuenta a través de las perspectivas de los mencionados héroes y al igual que en los juegos SaGa anteriores, podemos jugar con cada uno y son muy diferentes entre sí. Sin embargo, no importa con qué héroe juegues, el circuito de juego implica atravesar un mundo interconectado mientras luchas contra monstruos y hablamos con NPC.
Scarlet Grace: Ambitions tiene un sistema de juego no lineal característico de la serie y una amplia variedad de personajes para reclutar y usar en la batalla. Lo primero que nos encontramos es que comenzamos con una serie de pruebas de personalidad que determinan nuestro personaje inicial y sus estadísticas. Después de elegir a cuál de los cuatro protagonistas seguir, tampoco es que estemos atados al que nos ofrecen.
Aunque hay un genial mapa mundi en 2D, no exploraremos mazmorras como en otros juegos, ni veremos diseños de las ciudades. En cambio, cada ubicación es solo una pantalla que va directamente a lo que se supone que debes estar haciendo allí. Ya sea que estés comprando artículos o luchando contra monstruos en mazmorras o reclutando aliados. El mapa mundi se implementa fantásticamente a medida que abres gradualmente nuevas áreas y haces que los eventos se desarrollen.
Uno de los aspecto más llamativos del juego es su sistema de batalla. Viene siendo una mezcla de turnos y estrategia, al estilo de los primeros Dragon Quest. Al comienzo de cada turno, se te otorgan estrellas que gastas para las acciones de los miembros del grupo. Las habilidades más poderosas requieren más estrellas, por lo que optimizar cada turno puede ser esencial.
Una de las principales mecánicas son los «ataques unidos», que ocurren cuando algún enemigo o aliado cae en batalla y los iconos en la parte inferior de la pantalla se alinean. Estos ataques pueden dar a los jugadores una ventaja en la batalla, pero los enemigos también pueden realizar ataques unidos que deben evitarse.
En cada encuentro se necesita jugar mucho con la secuencia de batalla para evitar ser derrotados. Varias técnicas y hechizos también usan BP, que están indicados por estrellas que se acumulan en función del flujo de la batalla. Por ejemplo, usar ciertas formaciones de batalla y habilidades de dominio les da a los personajes más BP para gastar en diferentes ataques, lo que hace que un aliado pueda perder su turno si las estrellas se agotan.
Este juego es tan diferente que no hay elementos de curación o apoyo en este juego; la curación se realiza principalmente mediante magia o un comando de «Gracia» que se activa al azar.
Gráficamente, este es un juego que viene de PS Vita, por lo que sus gráficos están un poco remozados. Como analizamos la versión de Switch, donde mejor se ve es en el modo portátil. Me agradó bastante el diseño del mapa, mezcla entre dibujos 2D japoneses que recuerdan al estilo de Okami.
Sin embargo su banda sonora es una de sus mejores cualidades, compuesta por el habitual de la serie SaGa, Kenji Ito. Tenemos con una paleta de sonido más rica con una orquesta completa e incluso más instrumentales orientados al rock. Lo más destacado es definitivamente la música de batalla final, que es un tema de épico bastante intenso.
Conclusión
Empiezo diciendo que Scarlet Grace, no es el clásico juego RPG que podremos ver del catalogo de Square Enix. Es un juego donde hay que pensar muy bien cada movimiento, con un toque de azar en cuanto a los ataques de los enemigos. Aunque la presentación es diferente, todavía está en la línea de los juegos SaGa existentes con diferentes protagonistas únicos, una variedad interesante de personajes para reclutar y un sistema de batalla que implica muchas estrategias y prácticas. No es un juego fácil de dominar pero es muy gratificante.
Nota: Este review se realizó en la versión de Nintendo Switch y la copia fue cedida gracias a Square Enix.