El sable de luz original de Darth Vader, usado por Dave Prowse y Bob Anderson en The Empire Strikes Back y Return of the Jedi, se vendió por $3.65 millones de dólares en la subasta de Propstore, superando todas las expectativas y convirtiéndose en la venta más alta registrada para un objeto de Star Wars.
Pero el impacto no terminó con el martillazo. En redes sociales, la noticia se volvió viral. Algunos celebraron el momento como una victoria para los coleccionistas: “$3.65M por el sable de Vader… vale cada centavo por la leyenda”, escribió un fan. Otros, con tono más sarcástico, comentaron: “Por ese precio, mínimo debería venir con poderes Jedi incluidos”.
La conversación se encendió en Reddit, X y foros especializados, donde miles debatieron si el precio era justo, exagerado o simplemente inevitable.
Brandon Alinger, representante de Propstore, explicó que el sable es una pieza única, digna de las mejores colecciones. Y con esta venta, queda claro que el legado de Darth Vader no solo vive en la pantalla, ahora también en vitrinas blindadas y cuentas bancarias millonarias.
Hay objetos que no se compran por lo que son, sino por lo que significan. Y este sable de luz no es solo una réplica, ya es historia.