La suprema corte de Rusia ha lanzado una nueva ley este jueves en donde se prohíbe cualquier activismo gay catalogando como algo “extremista” ya que quienes lo hagan serán arrestados y juzgados.
Según publica el sitio web Reuters, la corte anunció el pasado jueves una solicitud del ministro de justicia donde se banea y se prohíbe completamente el movimiento llamado “the international LGBT social movement”.
Si bien los críticos calificaron el fallo como una tontería legal, el Kremlin parece estar apostando por la homofobia global como una ideología unificadora que alineará a los países intolerantes (particularmente en Medio Oriente y África) contra el Occidente liberal.
En muchas naciones de Medio Oriente y África, la homosexualidad es ilegal. Las políticas anti-LGBTQ+ han sido durante mucho tiempo una causa populista, por ejemplo en Uganda, que criminalizó las relaciones entre personas del mismo sexo a principios de este año, imponiendo incluso una posible pena de muerte por homosexualidad “agravada”.
Por otro lado el juez Oleg Nefedov ordenó que la prohibición, que surgió tras una petición del Ministerio de Justicia ante el tribunal, entrara en vigor de inmediato.
La prohibición probablemente obligará a los grupos LGBTQ+ a operar en secreto y podría usarse contra las personas que se unan al grupo, aunque las implicaciones legales aún no están claras.
