El esperado Resident Evil Requiem mostró por primera vez su jugabilidad, confirmando su innovador sistema que alterna entre primera y tercera persona. Anunciado oficialmente en The Game Awards, el juego llegará el 27 de febrero de 2026 a PlayStation 5, Xbox Series X/S y PC, marcando lo que Capcom describe como «un cambio audaz» para la franquicia de terror.
La nueva entrega seguirá a Grace Ashcroft, hija de Alyssa (protagonista de Resident Evil Outbreak), una analista del FBI que investiga misteriosas muertes en las ruinas de Raccoon City, casi unos treinta años después de su destrucción en Resident Evil 3. Según el director Koshi Nakanishi (responsable de RE7), Grace es un personaje inusual para la saga: una profesional sin experiencia en combate cuyo desarrollo los jugadores experimentarán directamente a medida que aprende a sobrevivir en este mundo hostil. Leon fue considerado para protagonizar esta entrega, pero decidieron ir con otro personaje totalmente opuesto.
El avance mostró cómo el juego alterna entre perspectivas, sugiriendo que la primera persona se usará para momentos de exploración y terror más íntimo, mientras que la tercera persona podría reservarse para situaciones de acción más intensa. Esta mecánica dual promete ofrecer una experiencia fresca mientras mantiene la esencia clásica de la serie.
La elección de regresar a Raccoon City, pero en un estado de abandono y ruina, ofrece un escenario ideal para combinar nostalgia con nuevas ideas. Las imágenes muestran edificios derrumbados, calles desoladas y una atmósfera opresiva que recuerda a los mejores momentos de la saga.
Con Resident Evil Requiem, Capcom parece estar buscando un equilibrio entre el terror puro de entregas como RE7 y RE2 Remake y la acción más marcada de RE4.
El lanzamiento en febrero de 2026 posiciona al juego en un momento estratégico, evitando la competencia directa con otros títulos de terror que suelen llegar en octubre.
Con esta apuesta, Capcom demuestra una vez más su capacidad para reinventar su franquicia insignia mientras mantiene vivo el legado de una de las sagas más influyentes del survival horror.