Red Bull sorprendió al mundo con un espectáculo único, dónde transformó más de 2.800 drones en el juego de Tetris más grande jamás realizado, proyectado sobre el icónico Dubai Frame, de 150 metros de altura.
El evento, parte de la final del Red Bull Tetris World, fue descrito como el primer Tetris jugable al aire libre. Cada partida requería 1.400 drones por jugador debido a la duración de las baterías, lo que convirtió la experiencia en un reto tanto técnico como visual.
El campeón fue Fehmi Atalar, de Turquía, quien alcanzó un impresionante puntaje de 168,566 en apenas cinco minutos. En segundo lugar quedó Leo Solórzano, de Perú, con 57,164 puntos, demostrando el nivel internacional de la competencia.
Red Bull definió la experiencia como “phone to drone”, ya que las clasificatorias se realizaron en más de 60 países directamente desde dispositivos móviles. Para Atalar, el triunfo fue inolvidable: “Jugué como una máquina y logré una carrera impecable, sin perder un solo punto”.
Este espectáculo no solo marcó un récord mundial, sino que también mostró cómo la tecnología y los videojuegos pueden fusionarse para crear un evento que trasciende lo deportivo y se convierte en arte digital.
