R-Type Final 2 Review

La primera vez que jugué un título de R-Type, fue R-Type Delta para PlayStation original. Hasta ese momento no sabía que era toda una saga del género Shoot ‘em up  que empezó en la SNES, Arcade y PC creada por la desarrolladora Irem. De una u otra manera, se han lanzado un juego de la serie en cada generación. Ahora toca el turno a R-Type Final 2, desarrollado por Granzella, estudio de antiguos miembros de Irem.

Es una saga que como los juegos del apogeo de los mata-marcianos, tiene una dificultad progresiva y que tiene una característica única, el uso del orbe Force. El juego es posible gracias a una campaña de crowdfunding en Kickstarter, donde tuvo el éxito requerido.

Sobre la historia, viene a ser mas o menos lo mismo a lo largo de la saga. Tenemos que hacer frente al Imperio de los Bydos, una raza alienigena que amenaza la galaxia. Pero el fuerte del género no siempre está en su trama. Nada de giros complejos de guión, ni personajes a destacar, mas que las propias naves. Si tiene una que otra opciones de respuesta en cinemáticas, pero nada que impacte lo que presenciaremos.

Sobre la jugabilidad de R-Type Final 2, sabemos que es un Shoot ‘em up  de scroll lateral, donde debemos hacer frente a hordas y hordas de enemigos. Lo que destaca de otros juegos es que disponemos de un orbe llamado Force que amplia nuestro rango de ataque. También tenemos varias opciones de naves que cambian el comportamiento de los ataques de Force, como la legendaria R-9A Arrowhead.

También es posible controlar la trayectoria del orbe Force presionando un botón para acoplar y desacoplar, tanto delante como detrás de la nave. El orbe sirve para potenciar nuestras armas mediante la obtención de Power ups, además de servir de escudo contra algunos de los ataques enemigos. Al tener el orbe desacoplado sirve como una nave secundaria que dispara a los enemigos y los atraviesa también.

Dependiendo del tipo de nave tenemos diferentes estilos de disparos de Force. Por ejemplo R-9 es la nave mas estándar, con disparos como rayos laser, disparo en espiral, disparos de rebote etc. Otras naves tienen tentáculos que se extienden y en consecuencia cambian el modo de disparo. También hay un modo de disparo cargado que, otra vez dependiendo la nave, cambia.

La alta dificultad del título radica en que los enemigos pueden venir tanto delante como detrás. Esto obliga a que memoricemos los niveles para saber por donde aparecen los enemigos. También al morir, perdemos todas las mejoras recogidas hasta el momento, lo que resulta muy frustrante. Debemos empezar a recoger otro Force y si acaso el power up en nivel 1.

Fuera de la jugabilidad, en R-Type Final 2 tenemos la opción de personalizar nuestras naves. Podemos con una nave R-9 tener el Force de una OF-5, o viceversa. También podemos tener los misiles que se comporten de una forma, los orbes de escudo, incluso el color y pegatinas de las naves. Es algo genial que permite un número grande de posibilidades.

Habrán varios niveles de dificultad, entre modo práctica, donde empezamos con Force de inicio; hasta un modo locura, donde no tendremos respiro alguno. Cada nivel implica menos enemigos y menos disparos para acabar con ellos. Eso sí, las recompensas no serán las mismas acabar en uno u otro nivel de dificultad.

Hablando de recompensas, iremos desbloqueando hasta un total de 99 naves a lo largo de la aventura. Estas naves tienen comportamiento y ataques diferentes, lo que hace que valga la pena el esfuerzo. Para eso, se necesita conseguir materiales para ese finAl ser un juego que fue posible gracias a las donaciones, Irem ofrecerá a los mecenas códigos para naves especiales. También iremos desbloqueando caminos alternos a partir de ciertos niveles para dar un toque de rejugabilidad.

Gráficamente el juego es decente, naves, entornos y enemigos modelados en 3D con jugabilidad en 2D. Corre como la seda en cuanto a movimiento y no se apreció ralentizaciones por tener muchos enemigos en pantalla. Claro, hay texturas y niveles que se ven mejor que otros, pero por lo general mantiene el tipo. Todo eso aderezado con una banda sonora modesta, propia de este tipo de títulos.

Veredicto

Hoy en día ya no se ven tantos juegos del género en el mercado, sobre todo uno como R-Type, donde abundan tantos Bullet Hell. Es un juego entretenido y desafiante que nos obligará a aprender patrones y saber elegir la mejor nave para hacer frente a hordas y hordas de enemigos. Lementablemente, la misma dificultad puede jugarle en contra, al perder todos los power ups conseguidos si morimos. Eso sí poder desbloquear casi 100 naves es una buena motivación.

Nota: Este review fue realizado en PS4 y el código fue cedido gracias a NIS America.