El ex CEO de Activision Blizzard, Bobby Kotick, no se guardó su opinión sobre la película de Warcraft de 2016. En una reciente entrevista, Kotick calificó la película como «una de las peores» que ha visto y reveló que tuvo un impacto negativo en el desarrollo del popular juego World of Warcraft.
Según Kotick, la producción de la película distrajo a los desarrolladores de Blizzard, quienes participaron activamente en el proyecto, lo que provocó retrasos en las expansiones y actualizaciones del juego. Además, la película habría sido un factor en la decisión de Chris Metzen, uno de los diseñadores clave de Blizzard, de abandonar la compañía en 2016.
Kotick describió a Metzen como «el corazón y el alma de la creatividad» de la empresa y lamentó su partida, atribuyéndola en parte al estrés y la frustración causados por la película. Aunque la película no tuvo éxito en Norteamérica, sí lo tuvo a nivel internacional, especialmente en China, recaudando $439 millones. Sin embargo, esto no fue suficiente para cubrir su elevado presupuesto.
Kotick reveló que «rogó» a Metzen que volviera como consultor, pero este último criticó duramente los planes para las siguientes expansiones de WoW, lo que llevó a una revisión completa. A pesar de su regreso, Kotick admitió que no suele hablar con Metzen sobre diseño de juegos, ya que respeta su experiencia y criterio.
Lla película de Warcraft no solo fue un fracaso cinematográfico para Bobby Kotick, sino que también afectó negativamente el desarrollo de World of Warcraft. La polémica opinión de Kotick sobre la película sin duda generará debate entre los fans de Warcraft y los seguidores de la industria de los videojuegos.