Aunque Nintendo Switch 2 ya es un éxito rotundo, con más de 5,8 millones de unidades vendidas solo en junio, la consola pudo haber llegado antes, pero Nintendo decidió esperar. Esto debido a que sus desarrolladores pidieron más tiempo para perfeccionar los juegos que acompañarían el lanzamiento, y la compañía lo concedió sin dudar.
Según fuentes cercanas a Bloomberg, Nintendo modificó varias veces su calendario interno para asegurarse de que los títulos estuvieran listos, incluso si eso significaba afectar a distribuidoras externas que también tenían planes para la nueva consola. La prioridad era, la experiencia de juego, debía estar pulida al máximo desde el día uno.
Joost van Dreunen, analista y profesor en NYU, lo resume así: “Nintendo nunca se ha confundido con una empresa tecnológica. Su foco siempre ha sido lo que más divierte”. Y eso se nota, Mario Kart: World y Donkey Kong: Bananza ya están conquistando a los jugadores, mientras que títulos como Metroid Prime 4: Beyond, Pokémon Z-A y Borderlands 4 prometen mantener el ritmo.
En una industria que a menudo corre por llegar primero, Nintendo eligió llegar después, pero mejor. Porque para ellos, no se trata de lanzar rápido, se trata de lanzar de forma óptima.