Hace un tiempo en mi era del PS3 pude jugar un grandioso juego llamado Ni No Kuni: Wrath of the White Witch un hermoso juego JRPG que nos brindo unas horas de juego maravillosas, ahora el desarrollador Level-5 de la mano de Bandai Namco nos trae Ni no Kuni II: Revenant Kingdom con una maravillosa combinación de sistemas de juego que ayuda a construir algo que te mantendrá enganchado. Ni No Kuni II es un homenaje a los JRPG de antaño, al mismo tiempo que impulsa el género hacia adelante con un entusiasmo contagioso.
Ni no Kuni II : Revenant Kingdom cuenta la historia de Evan Pettiwhisker Tildrum, el joven rey de Ding Dong Dell que desea crear una tierra en la que todos puedan vivir felices para siempre. Por supuesto, esto es más fácil decirlo que hacerlo (LOL). Después de ser destronado y desterrado de su tierra natal, Evan se une al misterioso Roland y Sky Tanta Tani para viajar por el mundo en busca de un nuevo hogar y dignos aliados, la narración es corriente pero útil.
Evan y Roland viajan a Cloudcoil Canyon para buscar un Kingmaker para ellos. Allí se les unen un grupo de piratas del cielo, su jefe Batu y su hija Tani quienes los ayudan a llegar al santuario en el cual Evan debe someterse a un juicio para establecer un vínculo con un nuevo Hacedor de Reyes. Tras el éxito, Evan se une al pequeño Lofty, su nuevo hacedor de reyes. Juntos, este variopinto equipo crea el nuevo reino de Evermore. Interesado en conocer su nombre, Roland le ordena a Evan que se ponga en contacto con un reino vecino: Goldpaw.
Cuando llega la pandilla, descubren que los ciudadanos de Goldpaw han construido sus vidas en torno al juego de azar con dados. El estado posee el casino más grande de la ciudad, y una estatua gigante llamada «Lady Luck» contiene un gran dado que se lanza para determinar las principales decisiones políticas. La suerte de Lady Luck ha sido de seis durante tres meses consecutivos, multiplicando los impuestos por seis veces cada vez. Después de un poco de curiosear, Evan puede descubrir una conspiración dirigida por el gobernante de Goldpaw, el Maestro Pugnacious. Todos los dados en la ciudad son suministrados por el estado para ser utilizados únicamente por personas específicas, y han sido manipulados para permitir que el rodillo determine el número que lanzan. Incluso el dado de Lady Luck está controlado remotamente por Pugnacious. El objetivo de este gran engaño fue convertir a Goldpaw en la nación más rica del mundo al aumentar los impuestos y cobrar las deudas de los jugadores de casino y los turistas.
Evan y Roland revelan esto a los ciudadanos, lo que hace que Pugnacious comience a incomodarse. En este momento, su asesor se transforma en una figura sombría con una gran serpiente dorada como cabeza. El Hacedor de reinos del reino, Longfang, se vuelve loco, y Evan debe reprimirlo en la batalla. Luego, descubren que quien robó el Kingsbond es el Rey Doloran que una vez gobernó un reino aterrador y poderoso que un día desapareció por completo. Él tiene la mira puesta en robar más Kingsbonds de líderes notables de todo el mundo, en un intento de restablecer una conexión con su nación perdida y Kingmaker.
Deseosos de unir al mundo bajo una bandera común y eliminar la guerra mundial por la paz, Evan y sus aliados comienzan el proceso de llegar a cada nación importante para firmar la Declaración de Interdependencia, un tratado entre todas las naciones que una vez fue intentado por un antiguo Rey llamado Ferdinand.
Afortunadamente, la configuración exquisita y el amable elenco de personajes compensan la trama peatonal que no transmite de manera efectiva una serie de historias de fondo. Más allá de algunas escenas clave, los gustos de Roland y Tani rara vez ven cómo se exploran sus personalidades, lo que habría sido una oportunidad clave para acercarse a rostros que de otro modo serían entrañables. Además de la inconsistente narración, el resto de Ni No Kuni II es fantástico, alcanzando alturas similares a algunos de los mejores juegos de rol de la generación. El combate es rápido y llamativo donde la exploración se hace eco de la brillante era del reinado de Final Fantasy.
En los combates es totalmente diferente a su predecesora, abandonando el sistema «familiar» de capturar criaturas para luchar por ti y optando por algo más parecido a la serie Kingdom Hearts. Tu grupo se compone de tres personajes en un momento dado, cada uno equipado con el mismo número de armas junto con una serie de habilidades personalizables. Realmente es muy simple, ofrece un nivel de fácil accesibilidad.
Los ataques ligeros y pesados son lo único a tu disposición, lo que significa que estás al día en cuestión de segundos sin tener que romperte la cabeza. Sin embargo, eso no quiere decir que las cosas sean tan fáciles. Las batallas de jefes más grandes y las misiones de recompensas posteriores ofrecen un desafío formidable, que te obliga a superar al enemigo utilizando todos los elementos y habilidades a tu favor. Los encuentros como este son grandiosos, evocan una exhibición de grandes coloridos ya que los efectos espectaculares acompañan al balanceo de cada arma.
El gran reto de Ni No Kuni II se encuentra en Kingdom Building, un constructor de ciudades excepcional donde Evan debe construir instalaciones y reclutar ciudadanos para aumentar su influencia en todo el mundo. Al parecer el juego está diseñado para complementar Kingdom Building. Cada vez más, la tierra recién formada de Evan, me proporciona un sentido de inversión que la narrativa principal no pudo ofrecer. Volver a al reino una y otra vez para vaciar las arcas e invertir en nuevas empresas resulta ser una adicción.
Las tropas en el edificio del Reino son pobladas por ciudadanos reclutados en Evermore. Todos están en posesión de habilidades especiales que pueden debilitar a tus aliados o devastar a la fuerza contraria. A pesar de ser agradable, este es sin duda el elemento más débil de Ni No Kuni II en gran parte debido a que su método de progresión se sentía inconsistente. Como resultado, a menudo estaba debajo de mi nivel para enfrentar la mayoría de algunos enemigos que encontré. Explorar el mundo de Ni No Kuni II se siente muy nostálgico. La forma en que se hace eco deliberadamente del diseño de rol de décadas anteriores en su mapa y ciudades es un placer, que recuerda grandes juegos de la vieja escuela.
Sobre su gameplay es un juego de rol desde una perspectiva en tercera persona. donde completas misiones con escenarios lineales y objetivos establecidos para avanzar a través de la historia. Fuera de las misiones, los gamers pueden recorrer libremente el mundo abierto donde exploran pueblos, aldeas, mazmorras y otros lugares peligrosos diseminados por todo el mundo. Al abandonar una ubicación, los gamers ingresan al mapa mundial que se puede utilizar para seleccionar un destino, cuando encuentras a tus enemigos entras a un sistema de batalla. Las batallas tienen lugar en un campo de batalla abierto, lo que te permite moverte libremente por el área.
Durante las batallas puedes comandar un solo aliado en su grupo todo se compone en tres personajes elegidos donde puedes intercambiarlos en cualquier momento durante la batalla. Los otros dos personajes que no le ordenas combaten libremente por su cuenta. Para luchar contra enemigo usas ataques cuerpo a cuerpo, habilidades mágicas y «Higgledies». Los Higgledies son «espíritus de corazones» que existen en varias formas y pueden representar elementos. También puedes usar los Higgledies para llegar a áreas lejanas y para despejar y explorar las mazmorras.
Sus gráficos son muy hermosos, aunque en esta ocasión lo pude jugar en una PC Gaming, el juego no te da opciones de gráficos, el trae una configuración standar de la cual no tiene ningún desperdicio, sus colores son muy brillantes y en cuanto a los cambios de escenarios en los combates brinda una resolución exquisita brindando unos frames sin desperdicios. Básicamente las cinemáticas y el gameplay llevan de la mano el mismo brillo del juego.
Sobre el sonido del juego, este no trae unos efectos del otro mundo, pero si vas a disfrutar mucho de la música ambiental del juego, tanto como cuando vas a combatir con un enemigo y en todo el transcurso del juego. El sonido va de la mano con este tipo de juego que en ocasiones la música te dará cierto grado de inspiración mientras vas pasando las misiones y vas viviendo todo el tramo de la historia.
Conclusión
Ni No Kuni II : Revenant Kingdom es una hermosura de JRPG que abarca lo mejor del diseño clásico y que combina con algunas ideas nuevas y emocionantes. Es una mezcla de la vieja escuela con la actualidad. Este juego toma un papel similar a lo que es un juego ARPG. Todo gamer que pudo jugar su primera parte le va a encantar esta nueva entrega, si eres fanático de juegos antiguos como Suikoden o Dark Cloud donde te centras en la construcción de un reino o una ciudad, aquí también encontrarás muchas cosas similares que te gustarán. Este review fue realizado en una PC Gaming y la copia del juego fue gracias a Bandai Namco.