El famoso youtuber MrBeast (James Stephen Donaldson) visitó México para grabar un video en emblemáticos sitios arqueológicos como Calakmul en Campeche y Chichén Itzá y Balamcanché en Yucatán.
Aunque contaba con permisos oficiales del INAH (Instituto Nacional de Antropología e Historia), el organismo ahora presentó una demanda en su contra por uso indebido del contenido.
El video, titulado “I Explored 2000 Year Old Ancient Temples”, se publicó el 10 de mayo y ya supera los 60 millones de vistas. En él, MrBeast explora zonas restringidas al público, incluso afirma: “No puedo imaginar que el gobierno nos dejara hacer esto. Ni siquiera dejan entrar a arqueólogos”.
A pesar de que en la descripción del video se menciona que fue grabado con autorización del INAH y en colaboración con la Secretaría de Turismo, el instituto se inconformó con el contenido final, alegando distorsión de información y promoción comercial indebida durante la grabación. En una escena, el youtuber promociona sus productos Feastables mientras graba en los sitios históricos.
Aunque en un primer comunicado el INAH confirmó que las grabaciones se realizaron con supervisión y dentro de los permisos establecidos, más adelante cambió su postura y interpuso una denuncia administrativa contra la empresa Full Circle Media, representante de MrBeast.
Que revuelo ha causado el video del youtuber Mr Beast en las zonas arqueológicas mayas! De acuerdo al comunicado de las autoridades, él pagó por visitar los espacios y poder grabar. Lo que realmente me parece terrible es que aunque el comunicado del #INAH menciona que su dron no… pic.twitter.com/ZUAOHrcZfD
— Tlatoani_Cuauhtemoc (@Cuauhtemoc_1521) May 14, 2025
El instituto exige una retractación pública y compensación por el presunto uso comercial no autorizado del patrimonio arqueológico mexicano.
Además, especialistas como el historiador Enrique Ortiz (Tlatoani Cuauhtémoc) criticaron que escenas del video podrían incentivar a futuros visitantes a imitar conductas inadecuadas en zonas protegidas. También cuestionaron si el guion o fines del contenido fueron correctamente entregados al momento de solicitar los permisos.
Aunque el INAH reconoció que este tipo de contenidos puede generar interés en la cultura ancestral mexicana, advirtió que no tolerará que se utilicen con fines comerciales que desvirtúen el valor histórico de los sitios.