Game Pass es una de las mejores alternativas del mercado porque da acceso a un número considerable de títulos a cambio de una cuota mensual.
Su atractivo es innegable, pero se ha hablado mucho de su rentabilidad. Parece que actualmente tiene dificultades para aumentar el número de suscriptores, por lo que Microsoft tiene puestas sus esperanzas en uno de los grandes lanzamientos del año: Call of Duty: Black Ops 6.
El periodista Tom Warren, de The Verge, publicó un extenso artículo en el que ahonda en la situación que atraviesa la compañía y sus planes de futuro. Allí explica que, según sus fuentes, la casa de Xbox espera que la inclusión del FPS ayude a frenar el estancamiento de su servicio de suscripción.
En concreto, el periodista señala que el crecimiento de Game Pass se ha ralentizado en los últimos meses. Teniendo en cuenta que el servicio es un pilar del negocio y la estrategia de la compañía, está claro que una de sus prioridades es aumentar el número de suscripciones.
Según las fuentes de Tom Warren, Microsoft apostará por Call of Duty: Black Ops 6 para aumentar el número de suscripciones al programa de pago y, en consecuencia, incrementar sus ingresos por videojuegos. Según explica, hubo un largo debate interno sobre si era pertinente incluir la nueva entrega en el servicio.
Eso está en sintonía con informes anteriores. En mayo de 2024, se dijo que Microsoft y Activision estaban discutiendo la posibilidad de no lanzar las nuevas entregas en Game Pass debido al potencial impacto negativo en el rendimiento comercial de los juegos.