Muchos son los fanáticos que esperan tener en sus manos una consola Next-Gen este 2021, sin embargo, podrían tener que esperar más de un año a medida que continúa la escasez de chips gráficos. Según Toshiba, la escasez podría durar fácilmente hasta septiembre de 2022.
Un reporte de noticias de Bloomberg afirma que Toshiba no podrá satisfacer la demanda de microchips durante al menos otro año. En algunos casos, la compañía podría no ser capaz de estar en producción constante de chips hasta 2023. Debido al aumento de la demanda provocado por el mundo de la tecnología en constante evolución, así como a la escasez de materiales, los chips esenciales para la fabricación de consolas no parecen estar disponibles en el corto plazo.
Esto significa que los problemas de stock para aquellos que tienen esperanza este año de comprar una PlayStation 5 o una Xbox Series X probablemente continuarán hasta 2022 y hasta 2023. Obviamente, esto no es ideal para Sony o Microsoft, ya que los dos están presionando sus nuevas consolas con fuerza en los últimos meses del año en preparación para la temporada navideña.
