Kingdom Come: Deliverance solo nos trae a la mente Skyrim, pero sin la fantasía de los dragones y con un presupuesto muchísimo menor
Hay una crisis de sucesión. Después del glorioso reinado de Carlos IV, su hijo Wenceslao IV heredó la corona de Bohemia. Interesado más en beber y apostar que en gobernar, era considerado un rey pobre, lo que llevó a su hermano Segismundo a invadir para “restablecer el orden”. Los motivos de Segismundo no eran tan puros, por supuesto, y sus tropas abrieron paso a través de Bohemia.
Lo interesante es que este juego se basa en la historia real, la predicación protestante de Jan Hus, el Cisma Papal de 1378, todos estos eran los temas tratados en la Bohemia de Enrique. Pero como no todos somos fanáticos de la historia y quizá estaríamos un poco fuera de contexto jugando un juego con tanta historia en él, contaremos con un cuaderno o códice, que nos proporcionara información sobre los temas que los personajes plantean en las conversaciones: Cisma papal, personajes, batallas y un sinnúmero de información, que para los fanáticos de la historia (Como yo) invertiremos un gran número de horas solo leyendo.
En Kingdom come: Deliverance, juegas como Henry, un humilde campesino cuyos padres son violentamente asesinados a sus ojos, en el momento en que su aldea es incendiada durante la invasión del hermano del rey.
Logras escapar con una majestuosa espada, que tu padre, herrero, había forjado para una persona muy importante del reino. Aquí es donde comienza la aventura, y comenzarás a hacerte tu camino escalando en la sociedad.
Este juego mas que un RPG, se encuentra muy cerca a ser un simulador, mostrándonos un mundo muy colorido, lleno de la belleza que nos proporciona la naturaleza y la maldad que tenemos los humanos en nuestro mas profundo ser. El juego brilla por sus diálogos, las historia que nos muestra, el drama que vives en el recorrido de tu aventura.
Me hubiese gustado poder profundizar un poco mas en esta era medieval, las religiones, los caballeros y todo esto. Pero quizá llegar algo así, seria un proyecto demasiado ambicioso. Contamos con excelentes diálogos, las voces son geniales, y a lo largo de nuestra aventura nos toparemos con todo tipo de misiones, desde ir a comprar carbón para tu padre, hasta hacer de solucionador de asesinatos. Toda una locura.
Pero comencemos a hablar del juego en sí, y del punto más débil que encuentro en este; la jugabilidad. Si, el sistema de juego es un poco incómodo y difícil de acostumbrarse, esto sin mencionar que se trata de un juego medieval en primera persona, o sea, peleas de espadas en primera persona, lo cual creo es la peor combinación de Género/modalidad que se pueda encontrar en un juego.
Las batallas, uno contra uno, se siente muy incómodo, es muy difícil medir las distancias, acertar un golpe premeditado o simplemente seguir el ritmo. Y esto sin mencionar las batallas en grupo, donde Henry pierde el foco incontable cantidad de veces sin saber a quien atacar. Estoy viene como parte de la simulación, donde de acuerdo con tu experiencia en combate vas a ir ganando habilidad la cual es notablemente perceptible a la hora de pelear.
Correr durante las primeras horas de juego fue algo muy difícil, pues el joystick que da la dirección al personaje simplemente no respondía ni a la mitad de lo esperado. Luego de aplicar una actualización, un poco extensa, se corrigieron varios de estos problemas, pero la jugabilidad sigue siendo incomoda. Aunque esto no quita que, a lo largo del juego, simplemente te adaptes.
¿Qué tanto combate hay en el juego?
Bueno, esto dependerá la mayor parte del tiempo de ti, pues hay muchas situaciones que se pueden resolver de diferentes formas, dialogo, sugestión, soborno y violencia. Las habilidades que tendrás como Henry, abarcan mas que solo pelear y hablar, si no sabes leer, será un problema para ti, puedes solucionar una situación robando, pero teniendo muchísimo cuidado ya que, si te atrapan, esto afectará a tu reputación.
Me gusta bastante que el juego tienes fuertes influencias de un simulador, por lo que no te sorprenderás si al intentar hablar con un noble, mientras andas mal vestido, o simplemente andas después de una batalla, sencillamente te ignorarán o se alejarán de ti.
Esto por igual, te limita a que no encontrarás peleas sin sentido en todas partes, no hay cajas de loot que te ayuden en nada. Te encontrarás en un mundo abierto suficientemente grande, que irás conociendo según avances, pero este se siente muy poco pulido, quizás luego de otra actualización esto mejore, y estas paredes invisibles no sean tan incomodas.
Al momento de comprar cosas, esto es difícil, ya que durante las misiones recibes muy poco, estamos hablando de 5 a 20 monedas. Así que, para comprar hasta un saco de carbón, será difícil. Tendrás incluso hasta que regatear, lo cual es muy gracioso y hace que esta el hecho de comprar algo sea interesante en este juego.
Al momento de comprar tu primera espada te das cuenta de que este no es un juego como cualquier otro, donde de algún modo u otro, sabes que eres el héroe, y que es solo el comienzo, que luego de varias horas de juego, todo girará en torno a ti, pero no, te das cuenta de que solo eres un campesino, en una Europa que juzga solo por tu clase social.
Tus comidas deben de ser programadas, y cuidado con comer de más. Tus horarios de dormir, incluso debes preocuparte por bañarte, pues de no hacerlo le puedes resultar menos carismático a las personas y tu sigilo será menor, por motivos que ya se pueden imaginar.
El sigilo es algo super complicado en este juego, pues son muchos los factores que afectan a este, pues tu ropa, mientras más pesada sea, te será más difícil, también los metales, pues si estas usando una armadura, también te dificultará ser sigiloso. Y hasta los colores, pues una vestidura negra, puede perjudicarte durante el día, pero durante la noche jugará a tu favor.
El juego cuenta con autoguardado, este solo funcionará luego de eventos importantes, o cortes de escenas que tengan que ver con la misión que lleves en curso. Luego de esto, la única forma de guardar la partida es tomándote una bebida, que se llama “Schnapps of Saver” la cual te puede embriagar y es muy pero muy difícil de conseguir, por lo menos cuando vas iniciando el juego, pues cuesta unas 100 monedas, y en estas misiones, te resultará muy difícil llegar a ahorrar unos 50. Juzguen ustedes.
Yo los puedo lograr entender, es una forma de evitar los excesivos guardados de partida que muchos de nosotros solemos hacer, pero wao, esto es lleva el juego a otro extremo.
El juego cuenta con buenas gráficas, nada de que sorprenderse, los personajes están muy bien diseñados, no contamos con muchas expresiones y entiendo que por motivos del tan bajo presupuesto, hay situaciones que no ayudan a la parte visual del juego.
Un ejemplo de esto es cuando recibes, algo. Por ejemplo, te entregan una espada, o alguien te regala algo. Nunca presencias el objeto que te están regalando, pues el corte de cámara está por encima de las manos. Esto lo entiendo y he aprendido a convivir con ello, teniendo en cuenta el presupuesto para la creación de este juego.
En fin, Kingdom Come: Deliverance, es un juego que me ha dejado bastante sorprendido, vine esperando encontrar una imitación fallida de Skyrim y me encontré con un juego bastante original, con muchas características de un simulador. Lo cual a mi entender es algo fantástico. Lo controles no son los mejores y hay muchas fallas en la jugabilidad, pero la historia y las múltiples características únicas de este juego, simplemente hacen que se me olvide todo lo demás y solo pensar en querer jugar y ver hasta donde Henry nos contará su historia.
Este review fue realizado en PS4 gracias a Deep Silver.