Influencer de 21 años fallece por beber botella de whisky en reto viral

La búsqueda de popularidad y reconocimiento en las redes sociales ha llevado a la proliferación de retos virales, muchos de los cuales implican comportamientos peligrosos. Un reciente caso trágico en Tailandia ilustra los riesgos extremos que pueden acarrear estos desafíos. Thankam Kanthee, un joven influencer de 21 años conocido en línea como ‘Bank Leicester’, falleció tras participar en un reto que consistía en beber una botella entera de whisky.

Este joven, que contaba con una considerable cantidad de seguidores en redes sociales, era conocido por realizar desafíos extremos, buscando generar contenido impactante para su audiencia. En el pasado, ya había participado en retos que ponían en riesgo su salud, como consumir grandes cantidades de wasabi o incluso ingerir gel lubricante. Estas acciones, aunque peligrosas, no habían tenido consecuencias fatales hasta el reciente incidente.

El trágico suceso tuvo lugar durante una fiesta de cumpleaños en Chanthaburi, al este de Tailandia. Kanthee aceptó el reto de beber una botella de whisky de 350 ml de una sola vez a cambio de una suma de dinero: 30.000 baht tailandeses, equivalentes a unos 800 dólares. Este incentivo económico, según informes locales, era una motivación importante para el joven, quien utilizaba estas ganancias para ayudar a su familia.

Tras ingerir la gran cantidad de alcohol de forma repentina, Kanthee comenzó a experimentar malestar, vomitando y perdiendo el conocimiento poco después. La atmósfera festiva inicial se transformó rápidamente en una escena de pánico. Alrededor de las 3:40 de la madrugada del 26 de diciembre, el influencer sufrió una grave intoxicación etílica.

A pesar de ser trasladado de urgencia a un hospital local, los esfuerzos médicos fueron insuficientes para salvar su vida, y Thankam Kanthee fue declarado muerto.

Según ha informado la Policía Provincial de Chanthaburi, Ekkachart ‘Em’ Meephrom, el hombre que supuestamente propuso el reto y organizó la fiesta, ha sido acusado de causarle la muerte por negligencia, un delito que en Tailandia puede acarrear hasta 10 años de prisión o una multa de 200.000 baht (unos 5,000 dólares). El acusado reconoció su culpabilidad y se encuentra en prisión preventiva.

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