Informes recibidos de GfK Chart-Track, Call of Duty: Infinite Warfare ha vuelto a convertirse en el juego más vendido de la semana mayor parte del mundo.
Pero no todo es alegría, a pesar de mantenerse en el puesto número uno hay que destacar que sus ventas han descendido un 65% respecto a la semana pasada, un descenso mucho mayor que los experimentados por Battlefield 1 y Titanfall 2, sus principales competidores, en sus segundas semanas, los cuales fueron del 39% y el 41% respectivamente.