Parece que fue ayer, 1ro de diciembre de 2015… Cuando uno de los juegos multijugador en línea de disparos más metódicos que la humanidad haya visto hizo acto de presencia.
Para el agrado de muchos, y el desprecio de otros; Rainbow Six Siege fue una entrega que ha subsistido y evolucionado consistentemente por una duración de 8 años, y contando.
En una época en donde ya la cantidad de operadores por expansión supera a la cantidad de operadores del lanzamiento original, Ubisoft nos hizo la invitación a una presentación y servidor de prueba exclusivo para echar un vistazo a lo que se trae la primera temporada de su octavo año.
Hace la entrada Commanding Force
El nombre bajo el cual viene identificado el primer cuarto del 8vo año.
El mismo se trae principalmente una nueva operadora que promete retorcer los fundamentos estratégicos que conocemos de una manera radical.
Junto a ella, vienen cambios de calidad de vida tanto para jugadores nuevos, como para jugadores de consolas.
Los mismos buscan crear un ambiente competitivo de mayor integridad y del agrado de los jugadores que se toman el asunto en serio, abriéndole a la vez una entrada menos rocosa a jugadores que deseen integrarse a la franquicia desde cero.
Brava, la nueva operadora brasileira que llega a repotenciar la complejidad del juego
Nuestra nueva operadora es una atacante de corte metódico y estratégico que abre un universo completamente nuevo de posibilidades y habilidades, gracias a su dispositivo único.
Hablamos de un par de drones para hackeo que habilitan tomar control de dispositivos instalables por parte de los defensores.
Brava viene lanzada como un operador de armadura 1 y velocidad 3. Y la misma trae de respaldo el rifle de asalto “PARA 308” que ya conocemos de “Capitao”, o el rifle semiautomático “CAMRS” que inicialmente trajo «Buck» (con la interesante adición de agarraderas secundarias).
En el área de armas secundarias tenemos la USP40 y la Super Shorty. Todo parece indicar que la USP40 nunca tendrá su momento de esplendor, ya que siempre sale paralela a alguna secundaria mejor y más útil.
Sus dispositivos secundarios, en forma de «claymores» y «bombas de humo» habilitan una jugabilidad híbrida que puede ser tanto para ataques y eliminaciones como para ejecuciones in situ e instalar difusores.
Kludge, un nuevo tipo de dron que habilita interacciones impredecibles y super potentes
Desde cámaras de Maestro o Echo, hasta los anti granadas de Jager, los disruptores de Mute, o las trampas acústicas de Melusi y los explosivos de contacto de Kapkan…
El dron ofrece un diapasón de posibilidades casi infinito para darle un giro de 180 grados a una ronda, y tomar a los defensores por sorpresa de maneras extremadamente difíciles de predecir.
De la misma manera, Mozzie es un operador que se ve habilitado por interacciones sumamente interesantes al tomar control de los drones de Brava.
Con 3 cargas cada uno, Mozzie puede robarse uno de estos drones y apoderarse de otros drones de los atacantes o de dispositivos instalables como “claymores” o “airjabs”.
Esto habilita la posibilidad de que un Mozzie que esté de suerte y disponga de la paciencia pueda robarse los 5 drones de un equipo atacante.
Existen interacciones para fines de estudio en cuanto a dispositivos que son destruidos por el dron, opuesto a solamente tomar control de ellos, como el caso de las baterías de Bandit.
Calidad de vida para jugadores veteranos y jugadores venideros
El equipo de desarrollo sigue consistente en atacar las malas practicas a las que recurren ciertos jugadores que no causan más que molestias para aquellos que buscan un rato de diversión.
Desde los aimbotters y wallhackers; hasta aquellos que incorporan el uso de periféricos no permitidos en consolas, todos forman tropas de jugadores entregadas al sabotaje y al detrimento del juego en general.
Ubisoft ha anunciado nuevas medidas tras bastidores para combatir las malas prácticas con un cierto nivel de anonimato que impida a los desarrolladores de programas para “hacking” ponérseles a la delantera.
Entre los anuncios se habló de “Mousetrap”. Una iniciativa que sigue las entradas de dispositivo para impedir el uso de ratones y teclados en consolas. Una mala práctica que tiene tiempo causando que aquellos que juegan justamente con sus controles sientan vientos de injusticia en su contra.
De igual manera se implementará un sistema de tutoriales más extenso que busca ofrecerles un punto de entrada más claro y ligero a jugadores venideros que busquen comprender el juego e integrarse.
Para poner la cereza en el pastel, vemos evolución en el sistema de reputación; que una vez terminado y en su versión definitiva será una herramienta de orden que podrá segregar a los jugadores serios de los aguafiestas.
Finalizando…
No es menos que una brisa de aire fresco ver que, ante todas las adversidades habidas y por haber, Ubisoft sigue luchando para mantener viva una propiedad intelectual de la cual sus seguidores vienen enamorados por años.
Vemos mucho énfasis en las iniciativas sociales dentro del juego que permiten integración de nuevos jugadores y crean un ambiente competitivo ideal en el cual cada quien cae en el lugar que debe.
Desde los casuales hasta los más competitivamente empedernidos, vemos a Rainbow Six Siege acercarse a un futuro que se presta a sorprendernos con un crecimiento exponencial.
Estas impresiones fueron posibles gracias a la invitación para la presentación y beta cerrada, extendida a nosotros por Ubisoft.