Lo que todo fanático ha estado esperando finalmente ha llegado a Halo: The Master Chief Collection y es el aclamado Halo: Reach. Se ha lanzado como parte de la colección y por supuesto lo que nos imaginamos trajo consigo grandes mejoras en el nivel gráfico aunque es un juego que todos jugamos en la Xbox Original.
Para los que aun no recuerdan quizás la historia pero tenemos al equipo Noble quienes responden a un SOS sobre un posible ataque de insurgencia. Una vez que llegan, se dan cuenta de que no se trata de una insurgencia, sino más bien de una invasión completa del Covenant.
La historia es una que todo fanático de Halo conoce cuando el equipo de Noble intenta detener una fuerza aparentemente imparable, pero todos sabemos cómo terminará. Es una historia que disfruté muchísimo a pesar de su naturaleza predecible gracias a la buena escritura. Los personajes son algunos de los mejores que hemos tenido en Halo, por lo que cada muerte es mucho más impactante.
Halo Reach tiene casi diez años. Tengo que admitir que jugar este clásico en mi Xbox One S es una experiencia muy extraña, pero es completamente increíble. El disparo aún se siente muy bien y la adaptación se siente muy natural. Si bien el juego se ejecuta a una velocidad estable de 60 fps en Xbox One, aunque sabemos que en PC se puede desbloquear la velocidad de fotogramas y llegar tan alto como lo permita su hardware.
Esto es lo mejor que Halo tiene para ofrecer. Una fuerte campaña de ocho a diez horas repleta de mucha variedad y algunos de los mejores diseños de nivel en cualquier juego de disparos. Luego tenemos las mismas ofertas multijugador que teníamos antes, con todos los mapas y modos. Mi única queja es la incapacidad de votar por mapas y modos que a menudo conducen a repetir los mismos modos de juegos (a nadie le agrada esto). Independientemente de esa queja menor, esta sigue siendo la experiencia completa de Reach con muy poco compromiso.
No se ha hecho mucho visualmente en el juego. Las texturas se han modificado ligeramente para verse mejor, pero el juego realmente está empezando a mostrar su edad. Fuera de eso, esto es mucho Halo Reach y es llevado por la excelente dirección de arte de Bungie.
El sonido es mucho más interesante por supuesto en esta versión del juego. En su mayor parte, todo está intacto, desde la banda sonora estelar de Marin’o’donells hasta las voces de los actores y más. Una de mis características favoritas de Halo Reach en el pasado fue el alcance de la personalización y cómo progresas. Cada actividad te daba una cantidad de créditos que se pueden usar en un conjunto de armaduras cada vez más impresionante para decorar tu Spartan a tu manera.
Los créditos han sido reemplazados por el sistema de desbloqueo de pase de batalla completamente gratificante. Una rutina te da puntos de experiencia estándar que desbloqueara piezas de armadura progresivamente. No hay elección en cuanto a la armadura que obtienes mientras subes de nivel. Además, solo las actividades combinadas proporcionarán experiencia, por lo que no hay recompensas por completar las campañas o estas en partidas privadas con amigos aunque es algo lógico.
Lamentablemente, Reach no se ha lanzado con el modo Forge. Para no los que no saben es un editor en el juego que permite a las personas inventar sus propios modos, diseñando mapas y conjuntos de reglas para juegos al azar. Forge vendrá más adelante, e imagino que suficientes personas como a mi les gustará esto y recuerden que Reach trajo consigo mucha pero mucha nostalgia.
Aparte del cambio brusco en el sistema de progresión, esto sigue siendo Halo Reach. El adictivo juego central regresa con su campaña estelar y sus fantásticas ofertas multijugador. No solo eso, el precio de la entrada es más que justo. Cuando se lanzó hace nueve años, pensé que era el mejor Halo y hoy todavía siento lo mismo.
Este review fue realizado en un Xbox One S.