Calificada como una de las aventuras mas esperadas, Final Fantasy XV tiene lo suyo pero a su manera y forma.
Este era un análisis que se veía venir, el juego de él que todo el mundo habla y por el que la mayoría de los fanáticos han estado esperando con tantas ganas, Final Fantasy XV finalmente está aquí y un servidor quien escribe le ha tocado el honor de escribir este análisis.
Como siempre hago, este análisis no revela ninguna información relevante ni tampoco arruinará tu experiencia de juego. Lo que si no me hago responsable es de aquellos puntos de vista que pueda mostrarte y quiera dar a entender, todos sabemos que este era una entrega con muchas promesas y retos por delante.
Para terminar la introducción debo dejar claro que no soy ese fanático que se ha jugado las quince entregas del juego, tampoco soy ese amante que con tan solo con el nombre se le ponen los pelos de punta, soy ese gamer que buscaba algo más haya en todos los cuentos e historias que se hacían sobre este juego y yo personalmente tenía que comprobar que tanto se dice.
En esta entrega, tomas el control del Príncipe Noctis de Lucis quien se va con sus amigos/guardianes a un viaje que traería como resultado casarse con Lady Lunafreya de Tenebrae como un pacto de tranquilidad y armonía entre las naciones of Lucis y Niflheim. Dentro de este viaje el Príncipe Noctis es acompañado por tres de sus mejores amigos llamados Gladiolus, Ignis y Prompto.
Inmediatamente da inicio esta historia, te das cuenta lo necesarios e imprescindibles que son estos compañeros durante todo el trayecto. Al igual que los inseparables de entregas como Dragón Age Inquisition donde cada cual hacia su trabajo, en esta ocasión tenemos un grupo de jóvenes que velan por mantener con vida y proteger a su Príncipe. A su vez cada cual con su personalidad al máximo.
Uno de ellos es fanático de las fotografías y siempre mantiene ese espíritu aventurero, mientras que el otro es la persona encargada del paladar gourmet del equipo y que van a comer durante el día y no se puede quedar la buena gente pero con mucho musculo quien parece tener en liderazgo en algunas situaciones. Sinceramente este tipo de integración motiva a continuar llevando a cabo el desglose de cada personaje.
En este punto pues cabe mencionar que el progreso de cada personaje es homogéneo pero solo y únicamente el príncipe Noctis recibe puntuaciones diferentes, además de que solo en “algunos” ataques pasas a tomar el control de los demás todo y la mayoría de las batallas son libradas por el mismo Príncipe. Esto, puede resultar muy crítico en alguno de los casos ya que podríamos saturarnos en movimientos constantes y la realización de la misma tarea una y otra vez para avanzar una zona.
Estamos frente a un juego de mundo abierto pero no tan “abierto” ya que posees más de una alternativa para subir de nivel con misiones secundarias que puedes repetir una y otra vez, adicional a todo esto una gran lista de tareas y la típica necesidad de conseguir recompensas y misceláneos para recibir dinero/experiencia a cambio. Es algo muy cliché para este tipo de juego pero es una parte que no deja perder la esencia de lo que en realidad se trata Final Fantasy.
Lo que experimente realmente en esta entrega es esa sensación de que sería una gran aventura y créanme me sumergía por completo mientras más avanzaba.
No se hagan muchas ilusiones de que completando el contenido secundario de la historia será muy entretenido, caerás en un círculo vicioso donde el único resultado será recompensas mínimas pero poco beneficiosas pero si en realidad queremos tener recompensas grandes y niveles de dificultad digno de retos el juego trae consigo Dungeons (Mazmorras) donde vas por todo un laberinto buscando la manera de encontrar templos sagrados donde sí y solo si podrás conseguir poderes adicionales que te apoyaran en la historia principal.
Estas mazmorras tienen muchos elementos consumibles disponibles y la habilidad de ayudarte a desarrollar habilidades pero no podemos olvidar de que Square Enix nos prometió que estos modos de juego tendrán cierto reto a nivel de dificultar para garantizar al usuario esa competitividad que tanto buscan.
Hablemos ahora un poco de la calidad gráfica (la que todos esperaban). La versión que me tocó probar ha sido la de Xbox One Estándar la cual, para la temporada no está “nada mal” pero pudo ser mejor. Lamentable el caso esta versión cuenta con algunas escenas un tanto borrosas y poco descriptivas, los pixeles del juego no pueden ser apreciados aun por un televisor de 43 pulgadas a la máxima calidad que este puede dar.
Aunque si, el framerate fue muy estable en todas las partidas pero es muy incómodo sentir esa sensación de que este juego podría tener más calidad y detalle gráfico pero no lo aprovecharon o simplemente sufrió un ligero bajón de gráficos para su versión en la consola de Microsoft. Solo me queda esperar y tener la oportunidad de probarlo en la versión para Playstation 4 Pro en los últimos días.
Otro de los puntos que para mí iban a ser un reto muy grande para los desarrolladores, era el combate cuerpo a cuerpo y es que para ser sincero está bastante simple, una ligera combinación de teclas y eres invencible, algunos retrasos en los golpes de teclas que para ser claro no sé porque no sucedía en tiempo real. Lo importante de todo esto es que, el combate súper rápido y emociona cuando tienes total control de tus enemigos y sientes que no estás jugando con un personaje aprendiz sino que luce como todo un experto aunque realices el mismo combo de ataques una y otra vez.
En la parte de niveles gráficos y combinación de colores tengo que decirlo, se robaron el show. Este concepto de iluminación, luces de efectos y la magia hace del juego algo completamente nuevo para muchos fanáticos y más todavía para ese gamer que nunca ha tenido el placer de disfrutar una entrega de Final Fantasy de esta manera.
Mientras te trasladas de un lugar a otro tenemos la facilidad de disfrutar de una de las mejores bandas sonoras de todo el juego, desde un repertorio de entregas anteriores y una que otra música de vanguardia hace de la mayoría de los viajes estupendos, ahora bien algunas zonas se encuentran retiradas y no tenemos la habilidad de realizar un “viaje rápido” ni tampoco acortar distancia entre un punto y otro. El vehículo, el cual es mejor muchas veces ir a pie es muy lento, no siempre decido conducir manualmente y me lleva a donde tengo que ir para continuar con la misión y sucesivamente.
Por otro lado, los diálogos entre los personajes a veces excede ese límite de información y habladero mientras juegas, ya que no siempre tenemos la facilidad de estar escuchando al 100% los diálogos que los personajes mantienen durante un recorrido o trayectoria sea corto o largo. En mi caso y a opinión personal, no todos los personajes deberían mantener una conversación cuando debes estar atento a otras cosas más importantes.
Algo que si me tiene muy pero muy molesto son estos tiempos de carga entre capitulo y capitulo. Aparte de que son súper extensos y sin ningún sentido son también relativamente silenciosos, a veces crees que el juego se quedó congelado o simplemente no quiere que lo sigas jugando. Enserio podrías sacar tu momento para ir al baño o por un vaso de agua mientras tanto pero realmente son un poco frustrantes.
En conclusión
Final Fantasy XV es una aventura que no puedes dejar de tener en tu consola, es esa historia que necesitas ver en la que unos amigos se apoyan el uno al otro (aunque hablen mucho) sientes que estas frente a un juego que le fue dedicado tiempo y cariño como parece Square Enix realizo.
Desde el punto de vista de fanático de la saga, no creo sea tan sorpresiva esta entrega, porque es una mezcla entre lo rutinario de Final Fantasy con algo más vanguardista pero tampoco creo que a una persona que nunca ha experimentado el universo del juego se sienta incómodo. Las peleas son relativamente cómodas y balanceadas, es fácil adivinar lo que se tiene que hace en su momento y lo mejor de todo es que la mayoría de los ataques son asistidos.
Para juzgar por ti mismo y decidir si debes comprarlo es opción de cada persona. Pero luego de probarlo creo que valdría la pena más de una vez adquirir el juego y disfrutar de este asombro viaje. Este review fue realizado en Xbox One y la copia del juego fue gracias a Square Enix.
Alejandro Paula – GamersRD
