Apenas unos días después de que entre 30 y 40 desarrolladores fueran despedidos del equipo de Grand Theft Auto VI, las calles frente a las oficinas de Rockstar North en Edimburgo comenzaron a llenarse de pancartas, gritos y protestas por unos despidos injustificados.
Take-Two Interactive, la empresa matriz, justificó los despidos por “conducta grave”. Pero los ex empleados, junto a sindicatos como IWGB y UCU Edinburgh, no lo ven así. Acusan a Rockstar de estar desmantelando esfuerzos de sindicalización desde dentro. Y comenzaron a protestar desde el 3 y 4 de noviembre, y ya hay otra manifestación programada para el día 6.
Todos los despedidos estaban afiliados o en proceso de afiliarse a un sindicato. Y aunque Take-Two niega cualquier intento de represión laboral, el silencio de Rockstar solo alimenta la sospecha. SAG-AFTRA, el sindicato de actores de voz, también se sumó al apoyo a los despedidos.
La comunidad, por su parte, no se quedó callada. En Reddit, un usuario compartió imágenes de la protesta: “Un pequeño grupo con pancartas frente al edificio”, escribió. Pero cuando se trata de GTA, hasta lo más pequeño se amplifica.
El lanzamiento de GTA VI, previsto para mayo de 2026, ahora se ve envuelto en incertidumbre y polémica.