El estudio escocés Build a Rocket Boy, fundado por el exdirector de la saga GTA Leslie Benzies, ha iniciado un proceso de reestructuración que podría dejar sin empleo a más de 100 trabajadores de sus 500 empleados globales. La medida llega apenas tres semanas después del desastroso lanzamiento de MindsEye, su último título, que se ha convertido en uno de los juegos peor recibidos del año.
Según fuentes internas citadas por IGN, la compañía ha comenzado un período de consulta de 45 días con sus empleados, tal como exige la ley británica cuando los despidos superan las 100 personas. Esta drástica decisión sigue a las catastróficas críticas recibidas por MindsEye, que actualmente ostenta un vergonzoso 28/100 en Metacritic para su versión de PS5, la puntuación más baja registrada este año.
La situación ha alcanzado tal gravedad que PlayStation ha comenzado a ofrecer reembolsos masivos a los jugadores, una medida extremadamente inusual que solo se había visto anteriormente en casos como el lanzamiento inicial de Cyberpunk 2077.
En un comunicado emitido a principios de mes, el estudio expresó sentirse «desconsolado» por la recepción del juego y prometió trabajar en mejoras. Sin embargo, el daño a su reputación parece irreversible, especialmente considerando que este era el primer gran lanzamiento del estudio después de años de desarrollo y las altas expectativas generadas por su fundador.
Mientras los empleados enfrentan un futuro incierto, se especula que Build a Rocket Boy podría centrar todos sus esfuerzos en Everywhere, su ambicioso proyecto de metaverso que sigue en desarrollo.
Este episodio se suma a la creciente lista de estudios afectados por lanzamientos fallidos en una industria cada vez más competitiva y exigente.