El presidente Donald Trump firmó un decreto el 30 de julio de 2025, imponiendo un arancel del 50% a las importaciones de cobre a partir del 1 de agosto. Esta medida busca fortalecer la industria nacional, pero impactará sectores clave, incluido el mundo gaming.
El cobre, esencial para fabricar consolas, tarjetas gráficas y cables, verá un aumento en costos que podría afectar a empresas como Sony y NVIDIA.
La industria de videojuegos depende de componentes con cobre, como los circuitos de las PlayStation 5 o las GPUs de alta gama. Con la nueva tarifa, expertos estiman que el precio de las consolas podría subir hasta un 15%, según análisis preliminares. Esto preocupa a gamers que ya enfrentan incrementos por otros aranceles recientes, como los del acero y aluminio, golpeando el acceso a hardware nuevo.
Las empresas buscan alternativas, como trasladar producción a EE.UU., pero esto tomará tiempo. Mientras, Nintendo y Microsoft evalúan subir precios o retrasar lanzamientos, como ocurrió con la Switch 2. La Asociación de Software de Entretenimiento advierte que los costos podrían reducir el gasto de los consumidores en juegos, afectando un mercado de 60 mil millones de dólares anuales.
President Donald Trump imposed a 50% tariff on all semi-finished copper products coming into the US, but stopped short of applying the duty to imported refined copper, sparing much of the domestic industry from potential higher costs. https://t.co/JpbLOpY89K
— Bloomberg (@business) July 30, 2025
La medida ha generado críticas. Algunos ven un riesgo para la competitividad global del gaming estadounidense, mientras otros apoyan el enfoque de seguridad nacional. Con Chile como principal proveedor afectado, las cadenas de suministro globales podrían resentirse, complicando aún más el panorama para los fabricantes de videojuegos.