Es fácil que la gente se sienta sola después de estar encerrada todo el día debido a la situación actual. Como tal, las aplicaciones y los juegos que permiten a las personas interactuar han visto un aumento en popularidad. Esto incluye juegos como Among Us, que se ha convertido en uno de los juegos más populares después de dos años de oscuridad. Among Us ha encontrado docenas de formas de entretener a jugadores y no jugadores por igual, ya sea a través de juegos, transmisiones de Twitch, videos o incluso memes.
Pero algunos jugadores de Among Us, a saber, los menores de edad, están usando el juego para buscar posibles parejas. Los participantes ingresan a los lobbies públicos y preguntan a los demás por su género o estado civil. También participan en conversaciones coquetas, incluido el juego de roles, sin tener en cuenta el resto del vestíbulo. Algunos incluso ponen sus números de teléfono y los identificadores de las redes sociales en el chat, algo a lo que todo el lobby puede acceder.
No está claro de dónde vino la extraña idea, pero parece que se originó con TikTok, lo cual no es demasiado sorprendente considerando la controvertida reputación de TikTok. Aparentemente, hay una tendencia en la aplicación que hace que varios usuarios carguen montajes de ellos mismos conociendo gente en Among Us, coqueteando con ellos, obteniendo su número y luego saliendo por un tiempo. También son algunos que ven a la “chica linda” siendo golpeada por convertirse en uno de los chicos.
people need to realize that among us isn’t a dating site from r/cursedamongus
Los últimos videos destacan inadvertidamente el problema de las personas que realmente prueban esto en el juego: no tienen idea de con quién están hablando. Among Us aún no tiene perfiles ni cuentas, por lo que las personas que utilizan sus lobbies públicos son completamente anónimas, sin información sobre su edad ni nada por el estilo. En otras palabras, los jugadores menores de edad podrían estar hablando con depredadores o compartiendo información confidencial con personas que no deberían.
