YouTuber ruso podría ir a prisión por 3.5 años por jugar Pokemon Go en una iglesia

Suena como una locura, pero Ruslan Sokolovsky subio un vlog el año pasado en donde mostro un video de un noticiero donde se estaba hablando que cualquier persona que fuese atrapada jugando Pokémon Go en una iglesia podría ser multado por medio millón de robles, o en casos extremos, iría a la cárcel por 3 años.

Sokolovksy critico estas medidas que se encuentran cubiertas bajo la Ley de la Blasfemia de dicho país.

“Las acciones que ofendan los sentimientos de los creyentes,” forman parte de la ley, ya que son “dañinas para toda la sociedad ya que crean conflictos dentro de ella,” dijo Irina Yarovaya, una diputada de Rusia Unida y una de las iniciadoras de la ley.

La ley tuvo lugar en el 2013 después de que Pussy Riot realizara un concierto anti-Putin en forma de protesta que fue llevado a cabo dentro de la Catedral del Salvador de Moscow. Este crimen es castigable por cárcel y aunque la amenaza ya ha servido como freno suficiente para las personas, fue aplicada por primera vez el marzo del año pasado, solo unos cuantos meses antes de que Sokolovsky creará el video.

Luego de su introducción, este entro a la Iglesia de Todos Los Santos en Yekaterinburg – que aparentemente es un gimnasio de Pokémon Go, así que no es el primero en jugar allí – mientras concluía con un chiste sobre Jesús.

Un tiempo después, cuando el video fue subido a la red, un fiscal del estado acusó a Sokolovsky de incitar al odio religioso y fue arrestado y enviado a la detención pre-juicio antes de que eventualmente fuera puesto en libertad bajo fianza y puesto bajo arresto casero, de acuerdo a Reuters.

El caso ahora está en la corte y el fiscal está buscando que Sokolovsky sea enviado a la cárcel.

“Creo que no hay ninguna razón para excluir al acusado de responsabilidad “, dijo el fiscal a la corte el viernes, informó la agencia de noticias TASS. “Tampoco hay razón para condenarlo a una multa … Yo pido que el tribunal lo condene a 3,5 años en una colonia penal“.

“Estoy en estado de shock“, dijo Sokolovsky a la corte después de escuchar esto. “He estado en la cárcel, estuve allí por tres meses, y es la puerta al infierno.”

“No me considero un extremista, tal vez soy un idiota, pero no de ninguna manera un extremista“.

El veredicto será aprobado el 11 de mayo.

Cualquier ley que restrinja el habla es el primer paso en el camino de la locura. Los sentimientos heridos son una cuestión de subjetividad, y la cuestión de contexto e intención puede ser manipulada o ignorada. Veremos cómo se desarrollarán las cosas para Sokolovsky a finales de este mes.

Wilmor Medina – GamersRD