Warlander, como les habia mencionado en nuestro review original para PC, es un juego bastante interesante. Pero a la vez un tanto sencillo.
En Warlander y cito nuestro review original: “La jugabilidad en Warlander es un tanto sencilla, esta tiene dos batallas de ejércitos y cinco enfrentamientos entre ejércitos. Los jugadores son clasificados en escuadrones con diferentes roles.”
Como sucesor espiritual del exitoso juego Xbox Happy Wars, Toylogic intenta recrear la misma sensación alegre de guerra de castillos en Warlander. Desafortunadamente, esta vez Toylogic no logra acertar y entrega un título en su mayoría genérico que parece estar más enfocado en la monetización que en ofrecer una experiencia de juego interesante.
Aunque Warlander comienza con un diseño base divertido, En esta versión para PS5 rápidamente falla en otros aspectos clave que lo harían destacar. En primer lugar, echemos un vistazo a los gráficos. Si bien los gráficos en sí no son malos, el estilo artístico simplemente no destaca. Aunque hay algunos detalles en las armaduras y armas, en general, Warlander tiene un ambiente de dibujos animados medieval estándar.
A excepción de los cosméticos premium, que solo están disponibles con dinero real, parece que gran parte de Warlander pudo haber sido construida con activos preexistentes. Lo cual es un tanto lamentable.
Se podría perdonar el estilo artístico genérico si la jugabilidad fuera realmente buena. Sin embargo, es simplemente aceptable. Los enormes ejércitos de 20 contra 20 chocan en tres carriles al estilo MOBA, lo cual es bastante divertido. Los equipos se dividen en escuadrones encargados de la ofensiva, la defensa y las operaciones especiales, pero los jugadores son libres de ir a donde quieran.
En el mapa hay varios objetivos clave que deben capturarse, como torres que permiten aparecer más cerca del enemigo y catapultas para asediar. No hay personajes no jugables y las torres no disparan, pero controlar estos objetivos brinda una ventaja estratégica importante, por lo que todo el combate es jugador contra jugador.
El objetivo principal no es acumular muertes, sino destruir el núcleo del enemigo. Para lograr esto, necesitarás armas de asedio, o incluso un robot gigante ocasional, para derribar la fortaleza enemiga y eliminar su núcleo. Si ninguno de los núcleos sufre daños, el equipo con más torres al final será el ganador.
La principal desventaja es que el límite de habilidades es bastante bajo, lo que hace que el ciclo principal del juego se vuelva obsoleto rápidamente. Por ahora, solo hay tres clases disponibles: Guerrero, Mago y Clérigo. Cada clase puede equipar dos armas, cada una con dos habilidades. El Guerrero y el Clérigo siempre llevarán una combinación de espada/martillo y escudo, junto con un arma a distancia, mientras que las “armas” del Mago son simplemente hechizos genéricos como Bola de Fuego o Flecha Mágica. Además, cada personaje puede equipar una habilidad de equipo con un tiempo de reutilización relativamente largo, que causa una cantidad significativa de daño o mejora a los aliados cercanos.
Las cosas son un poco mejores para el Mago, ya que puedes alternar constantemente entre tus armas y conjuntos de habilidades. Sin embargo, el Guerrero y el Clérigo no necesariamente quieren cambiar a un arma a distancia en medio de una pelea. Además, el tiempo para eliminar a los enemigos en Warlander es relativamente corto, y a menudo usarás todas tus habilidades y luego morirás instantáneamente porque no tendrás una habilidad defensiva disponible, mientras que el enemigo aún tendrá todas sus habilidades ofensivas.
Sin embargo, hay una desventaja al usar personajes con más estrellas. Durante una batalla, los jugadores deben alcanzar un cierto nivel de valor antes de que se desbloqueen los personajes de mayor estrella. Esto se puede lograr obteniendo puntos de cualquier forma, como matando enemigos o destruyendo almenas. Una vez desbloqueado un personaje de mayor estrella, se puede invocar en la batalla, pero también tiene un tiempo de enfriamiento hasta que se puede volver a utilizar. Además, los personajes no pueden compartir equipo entre ellos.
Aquí es donde entra en juego el terrible sistema de monetización de Warlander. Los objetos no se pueden compartir entre personajes. Los objetos y el nivel de estrellas brindan una bonificación significativa a las estadísticas. Por lo tanto, tener más objetos de mayor calidad hará que tus personajes sean objetivamente más fuertes en el juego.
Este es un sistema molesto que promueve el grind intensivo, pero también hay un aspecto de “pagar para ganar”. Las opciones se pueden comprar con moneda premium.
En PS5, Warlander se siente diferente, su performance y sus gráficas no son del todo agradables para mi, aparte de cómo ha cambiado el sistema de monedas, donde el juego se convierte en Pay to win, nada de esto me gusta. El juego aún mantiene una jugabilidad original y que creo que algunos podrán disfrutar, pero definitivamente, queda a deber.
Este review fue realizado gracias a una copia para PS5 proporcionada por PLAION
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