Los gamers de la nueva generación ya se han acostumbrado a pagar $70 USD por los juegos más esperados. Sin embargo, este precio podría no ser suficiente para cubrir los crecientes costos de producción.
Matthew Karch, CEO de Saber Interactive, ha abierto la incertidumbre al advertir que el precio de $70 USD por juego podría no ser sostenible a largo plazo. Según Karch, el aumento en los costos de desarrollo, junto al alto riesgo que implica crear un videojuego exitoso, podrían obligar a las compañías a subir aún más el precio.
Karch argumenta que la industria del videojuego está experimentando un crecimiento exponencial en cuanto a la complejidad y el realismo de los juegos. Esto, naturalmente, implica un aumento en los costos de producción. A esto se suma el riesgo de que un juego no sea rentable, lo que puede poner en peligro la estabilidad financiera de las compañías.
Karch no ofrece soluciones mágicas. Según él, las opciones son subir el precio de los juegos o reducir los costos de producción. La primera opción es impopular entre los gamers, mientras que la segunda podría afectar la calidad de los juegos.
Es difícil predecir qué camino tomará la industria del videojuego. Lo que sí es seguro es que el precio de los juegos seguirá siendo un tema de debate en los próximos años.