Venom: The Last Dance obtuvo en su estreno unos resultados de taquilla inferiores a los esperados. Sin embargo, la última película del Universo Spider-Man de Sony protagonizada por Tom Hardy recibió cierto alivio gracias a las cifras de la taquilla internacional.
Según informa Variety, se esperaba que las ventas nacionales de entradas para la tercera película de Venom alcanzaran los 65 millones de dólares tras un coste de producción de 120 millones de dólares, sin incluir los costes de marketing. Las ventas mundiales alcanzaron los 124 millones de dólares para un total de 175 millones.
Los resultados nacionales también fueron inferiores a los de las dos películas anteriores. La primera Venom, protagonizada por Tom Hardy en el papel principal del antihéroe, recaudó 80 millones de dólares en la taquilla estadounidense, y la secuela Venom: Let There Be Carnage ganó algo de impulso con 90 millones de dólares.
Sony cree que el público se quedó en casa el pasado fin de semana para ver a los Yankees y a los Dodgers enfrentarse en las Series Mundiales, a pesar de que Nueva York y Los Ángeles son los dos mercados más importantes de Venom: The Last Dance.
Aun así, Venom: The Last Dance necesita funcionar y permanecer en los cines para recuperar su presupuesto de 120 millones de dólares, ya que los proyectos de Hollywood generalmente necesitan ganar el doble de su presupuesto para alcanzar el punto de equilibrio y empezar a obtener beneficios.