Bill Skarsgård, el actor que nos dio pesadillas como Pennywise y que ahora encarna al Conde Orlok en Nosferatu, acaba de declarar públicamente su deseo de interpretar al Joker en el nuevo universo cinematográfico de DC.
“Fui un niño Batman. Creo que hay un Joker muy cabrón dentro de mí”, dijo en el podcast Happy Sad Confused, dejando claro que no solo le interesa el papel, lo desea con intensidad.
Según reportes de The Hollywood Reporter y publicaciones virales en redes sociales, Skarsgård ya estaría en conversaciones para unirse a The Brave and the Bold, la película que presentará al nuevo Batman bajo la dirección de Andy Muschietti. La conexión es evidente, Muschietti dirigió It, donde Skarsgård brilló como el payaso asesino. Ahora, ese mismo terror podría transformarse en locura criminal.
Los fans están divididos. Algunos lo ven como una elección perfecta, capaz de canalizar la oscuridad de Ledger y la intensidad de Phoenix, mientras otros siguen aferrados a nombres como Willem Dafoe o Barry Keoghan. Pero si algo está claro, es que Skarsgård no quiere ser otro payaso. Quiere ser el payaso.
