Square Enix ha tomado decisiones drásticas para reajustar su rumbo en la industria del videojuego. La compañía japonesa ha absorbido una pérdida multimillonaria y está revisando su enfoque en el desarrollo de juegos para consolas y PC.
Este cambio de estrategia se produce tras la cancelación o modificación significativa de proyectos en desarrollo, lo que ha generado una pérdida extraordinaria de ¥22.1 mil millones (aproximadamente $140.9 millones) para Square Enix.
La empresa busca “ser más selectiva y centrada en la asignación de recursos de desarrollo” para juegos HD, es decir, aquellos destinados a PC y consolas, en contraste con los títulos para móviles y MMO.
La decisión de cancelar o reestructurar proyectos ha generado sorpresa, ya que en febrero Square Enix había pronosticado un aumento del 16.8% en las ventas anuales, llegando a ¥360 mil millones (aproximadamente $2.3 mil millones).
Sin embargo, las ganancias se mantenían planas en ¥55 mil millones (aproximadamente $350 millones). Ante este escenario, la compañía está “revisando cuidadosamente” sus pronósticos para evaluar el impacto de la amortización.
Si bien el lanzamiento de Final Fantasy 7 Rebirth en febrero se perfilaba como un éxito importante, Square Enix aún no ha revelado sus cifras de ventas, lo que ha generado dudas entre los analistas.
La reestructuración interna también ha sido tema de conversación. En febrero, tras la salida de Final Fantasy 16 (que vendió 3 millones de copias en su semana de lanzamiento y tendrá una versión para PC en el futuro), surgieron informes de que Takashi Kiryu, director y presidente de Square Enix, planeaba una nueva estructura corporativa debido a la caída de las ventas en su negocio de entretenimiento digital.
El futuro de Square Enix se presenta incierto. La cancelación de proyectos y la reestructuración plantean interrogantes sobre la dirección que tomará la compañía. Queda por ver si su nueva estrategia les permitirá recuperar el rumbo y entregar los éxitos que esperan los fanáticos.