Según los informes, Sony está empleando stcikers holográficos en Japón en su último intento de disuadir a los revendedores de PS5.
Los revendedores han sido un problema importante tanto para Sony como para Microsoft desde el lanzamiento de las consolas de generación actual, ya que aumentan los precios para aquellos ansiosos por obtener una PS5 o Xbox Series X/S.
La escasez de chips y los problemas de la cadena de suministro han hecho que sea muy difícil para muchos comprar una consola de generación actual, y los revendedores se han aprovechado de la demanda, comprando miles de unidades antes de venderlas a los consumidores con márgenes excesivos.
Incluso se informó que los revendedores de PS5 y Xbox Series X ganaron casi $60 millones a los pocos meses del lanzamiento de las consolas en 2020.
Según un Yahoo! Historia de Japón (a través de PlayStation LifeStyle), Sony está usando pegatinas para disuadir a los revendedores de PS5 en Japón.
El informe afirma que Sony está colocando sellos holográficos en todas las nuevas consolas PS5, que luego se les pide a los minoristas que rompan frente a los clientes.
La estrategia está destinada a evitar que los revendedores puedan vender artículos nuevos, ya que los compradores potenciales notarían el sello roto.
El sello holográfico especial se coloca en todas las cajas antes de enviarlas a los minoristas y las pegatinas son difíciles de cortar sin dañar la caja.
Teóricamente, debería ser casi imposible para un revendedor de PS5 quitar la pegatina a la fuerza sin arruinar la caja sellada, por lo que no pueden volver a vender la consola como un artículo nuevo.
Para empeorar las cosas para el consumidor, los revendedores de PS5 cobran precios escandalosos, y algunos aumentan el precio original de $499.99 USD a más de $1,400.
Si bien existen listados más baratos, rara vez caen por debajo de $850, un margen de beneficio cercano al 50%.
Ese tipo de sistema es malo tanto para el consumidor como para Sony, especialmente porque las existencias de PS5 mantienen niveles muy bajos.
La nueva etiqueta holográfica, si bien es una estrategia básica, probablemente disuadirá a los revendedores de obtener consolas adicionales de los minoristas, con la esperanza de frenar parte de la actividad ilegal.
El objetivo final es detener a los revendedores por completo, aunque eso probablemente requerirá iniciativas globales.
