El sector del juego es uno de los mercados que se más se esfuerza por mantenerse a la vanguardia en cuanto a seguridad, diseño e innovación en general se refiere. No en vano, juegos como el poker fueron de los primeros que se pudieron jugar a través de internet. Dentro del negocio de entretenimiento, hoy por hoy es uno de los sectores que más dinero mueve, no sólo para las empresas que comercializan el juego en todas sus vertientes, sino para los usuarios, que ven una manera de divertirse y al mismo tiempo cuentan con la posibilidad de conseguir beneficios económicos.
En el momento en que el factor dinero interviene, hay que prestar especial atención a la seguridad frente a los ciberataques, así que las marcas de gaming siempre van a procurar que sus usuarios no corran ningún riesgo: tanto sus datos personales como los bancarios experimentan cifrados tan seguros que incluso los bancos terminan por copiar esta tecnología. Pero no todos sus esfuerzos van orientados a generar o emplear software enfocado a la seguridad: diferentes acciones orquestadas de forma atinada hacen posible que toda la experiencia de juego sea fluida y sin preocupaciones.
Una de las medidas que marcas como MerkurMagic Casino llevan a cabo es crear sus propios juegos. Estos en concreto tiene su propia marca de juegos MerkurCaming que cuenta con un vasto catálogo en constante crecimiento. A diferencia de otras marcas que llegan a acuerdos con grandes desarrolladores de juegos como Playtech o Microgaming, prefieren ir paso a paso pero con mucha cautela: si controlan absolutamente cada elemento que conforma su marca y que se aloja en sus servidores, tienen total conocimiento de sus fortalezas y debilidades y pueden reforzar siempre su seguridad. En definitiva, controlan por completo lo que pueden ofrecer como marca y ofrecen una experiencia en la que todo encaja a la perfección.
Esto no significa que sea arriesgado jugar con otras marcas que acuden a desarrolladores externos. Por supuesto, estos desarrolladores tienen una dilatada experiencia a sus espaldas, han acumulado premios año tras año y han establecido interesantes alianzas con iconos de nuestra cultura (estudios cinematográficos, músicos famosos, etc) y tienen permiso para utilizar diferentes derechos de imagen para muchos de sus juegos, lo que finalmente se traduce en un catálogo que todo el mundo desea jugar, y que todos los casinos online desean incorporar a sus servidores. Esto pone en desventaja a las marcas que sólo operan con software propio porque no ofrecen juegos tan famosos. Pero efectivamente su punto fuerte es la confianza plena que los usuarios habituales ponen en ellos.
Por supuesto, cuando todo lo ofrecido por una marca es “de la casa”, los conflictos y posibilidades de errores se minimizan, lo mismo que sucede a nivel de hardware: cuando adquirimos un ordenador creado por marcas consolidadas como HP o Apple, sabemos que todos los componentes se relacionan a la perfección y que no surgen incompatibilidades entre ellos, de manera que resulta más complicado que aparezcan bugs o algo se desactive accidentalmente con una actualización. Otra ventaja es la ligereza en los plazos y la simplicidad en la toma de decisiones: cuantas menos partes intervienen, más rápido y fluido se vuelve el proceso de mejora o lanzamiento de funciones, productos y servicios, con lo que la atención se puede focalizar en otra dirección (por ejemplo, implementar una interfaz responsive o una pasarela de pago más cómoda).
Como siempre, es el usuario quien debe elegir qué le resulta más importante a la hora de escoger dónde y con quién jugar. La información siempre es una gran aliada cuando hay más de una opción, y sobre todo cuando son tantas y tan dispares.
