Chasm es un carismático Metroidvania que te pone en las manos de un guerrero novato que esta a punto de iniciar su aventura, en la cual deberá enfrentarse a diferentes enemigos en una variedad interesante de mapas interconectados.
Chasm posee una peculiaridad muy interesante, ya que los mapas, en realidad son un mundo generado a partir de una semilla para cada jugador, por lo tanto cada nueva partida estarás explorando un mapa distinto, con diferentes locaciones.
Así que ten cuidado cuando estés buscando información del juego en un tutorial, ya que es muy posible que tu mapa sea muy diferente.
Empezaras en unas Minas infectadas de criaturas, para luego ir a las Catacumbas a resolver un par de Puzzles, luego a los Jardines, pasaras por un Castillo donde conseguirás equipo muy necesario para avanzar, y por último llegaras a los niveles más complicados.
El Templo y el Infierno, el templo tiene muchas criaturas que te darán objetos para mejorar a tu equipo, y en el infierno podrás pelear contra una criatura tan desagradable (Shambler), que al principio será complicada de eliminar, pero al memorizar su patrón de ataque, te darás cuenta que estas ante una fuente inagotable de XP (250xp).
¿La barrera del Idioma afecta la experiencia?
Quizás es por el hecho de que solo se encuentra en inglés, y la barrera del idioma siempre ha sido eso, una barrera, y siendo honestos en algunas ocasiones necesitaras buscar que direcciones tomar, no es de extrañar que en los Metroidvaina debas “perderte”, volver sobre tus pasos y rebuscar en zonas específicas para continuar con la historia.
Además, las mecánicas siempre afectan la manera en la descubres el entorno, ya sea por medio de una habilidad especifica que te permita entrar en una zona nueva, un doble salto, un Dash, o el en caso de Chasm un equipo de buceo y agarrarte de los bordes.
Son habilidades como estas que te permiten continuar con la experiencia, pero una vez más debo recalcar que en ocasiones, no tienes certeza de adonde debes dirigirte, así que deberás buscar como continuar, pero fuera de este aspecto momentáneo, el juego es muy disfrutable.
Comparte una similitud con Castlevania a la hora de introducir armamento y equipo, como accesorios, armaduras y objetos para recuperar salud.
Todo el quipo para mejorar a tu personaje lo puedes encontrar de una sola manera y esa es a través del grinding, es simple, elimina a los enemigos específicos que dejaran piezas de equipo, como una espada que sube de nivel mientras más la usas.
O una armadura que te recupera la vida solo al ponértela, son pequeños detalles como estos los que te mantienen alerta a la hora de buscar un enemigo en específico.
Por ningún medio tienes que completar el 100% del juego, pero si quieres obtener un equipo para derribar a todos en cuestión de 4 o 5 golpes, entonces deberás buscar una guía para encontrar a los enemigos que te proporcionaran dicho equipo.
En lo personal recomiendo el siguiente:
Una armadura que puedes obtener al destruir al Undead Archer (castillo), la espada la puedes conseguir de Undead Swordman (castillo), los accesorios serán por aparte del Flesh Spawn (Jardines) y el casco lo conseguirás con el herrero, con el meteorito que consigues de los Royal Guard (Templo).
Son enemigos sumamente sencillos una vez entiendes como funcionan sus movimientos y como cualquier Metroidvania, es solo cuestión de aprenderte los movimientos hasta que puedas eliminarlos sin recibir daño alguno.
Ahora habiéndote presentado todos estos elementos, queda la pregunta ¿Por qué Chasm no fue tan reconocido?, pues la verdad es que el juego es de una duración muy corta pero su historia, aunque por momentos interesante, es muy simple.
Y queda opacado por mejores intentos de traer de vuelta el cariño de los metroidavania como lo hicieron Deadcells, Blasphemous, o uno de mis favoritos Infernax, estos juegos no solo tienen una jugabilidad adictiva, sino además un lore tan grande que es muy llamativo.
Chasm por otro lado, sufre al solo quedarse en la superficie y no explorar a fondo todos sus elementos, y es una lastima ya que posee un pixel art muy animado; pero a pesar de sus fallas vale la pena jugarlo, es uno de esos juegos que puedes terminar en una sola sentada y nunca te aburrirás de probar diferentes armas para variar el Gameplay.