El lunes, NVIDIA, el gigante tecnológico líder en la revolución de la inteligencia artificial (IA), enfrentó su peor jornada bursátil desde marzo de 2020, con una caída del 15% en sus acciones.
Este desplome le costó a la empresa alrededor de $534 millones en capitalización de mercado, la mayor pérdida diaria en la historia de Wall Street, superando incluso sus propios récords anteriores.
El detonante de esta caída fue el anuncio de DeepSeek, una compañía china de IA, que desarrolló un modelo de lenguaje avanzado similar a ChatGPT a un costo significativamente menor al de sus competidores estadounidenses. Aunque DeepSeek utilizó las unidades de procesamiento gráfico (GPU) de NVIDIA para entrenar su modelo, el hecho de que gastara solo $5,6 millones en tecnología de Nvidia ha generado dudas sobre la dependencia excesiva de los costosos chips de la empresa.
Este evento ha sacudido la confianza en el dominio estadounidense en la IA generativa y ha puesto en entredicho la tesis de inversión detrás del meteórico ascenso de NVIDIA. La empresa, que había alcanzado una valoración de $3,5 billones, cayó a $2,96 billones, perdiendo su posición como la compañía más valiosa del mundo frente a Apple y Microsoft. Además, el impacto se extendió a otros actores tecnológicos, como Arm, Broadcom y Oracle, cuyas acciones también cayeron más del 9%.
Expertos como Ed Yardeni, de Yardeni Research, advierten que si las grandes tecnológicas estadounidenses adoptan estrategias similares a las de DeepSeek para reducir costos, NVIDIA podría enfrentar un escenario complicado. Mientras tanto, el CEO de NVIDIA, Jensen Huang, vio su patrimonio neto reducirse en $19,000 millones, según estimaciones de Forbes.
BREAKING: This is not a memecoin.
This is Nvidia, $NVDA, the most valuable company in the world before today.
It is down 17%.
It lost $560 billion in market cap today so far, the largest in market history. pic.twitter.com/oh85aMY7uJ
— unusual_whales (@unusual_whales) January 27, 2025
Este episodio no solo marca un hito en la historia financiera de NVIDIA, sino que también plantea preguntas sobre el futuro de la industria de la IA y la competitividad global en este sector.