Un nuevo estudio ha revelado la asombrosa cantidad de dinero que Microsoft se gasta cada año para animar a desarrolladores y editores a llevar sus juegos a Xbox Game Pass.
Bloomberg informó de que “Microsoft gasta ahora 1,000 millones de dólares al año en conseguir juegos de terceros para el servicio de suscripción”. El sitio dijo que Microsoft ofrece “tarifas planas de millones de dólares por adelantado” para añadir títulos de editores más pequeños a Game Pass.
En 2021, el CEO de Microsoft Gaming, Phil Spencer, habló abiertamente sobre cómo no hay un camino definido para las ofertas que hace para los lanzamientos de Game Pass. Dijo que las ofertas de Game Pass de Microsoft están “por todas partes”, y entiende que esto pueda sonar “no gestionado”.
En algunos casos, Microsoft financiará por completo los costes de desarrollo de un juego, y el estudio podrá vender su juego en tiendas rivales como PlayStation y Steam, o en tiendas minoristas, mientras Microsoft disfruta del beneficio de tener otro juego de Game Pass.
En otros casos, un juego puede estar terminado y Microsoft llega a un acuerdo directo para incluirlo en Game Pass, según Spencer. Otros acuerdos tienen que ver con el uso y el grado de monetización del juego a través de las ventas internas.
Aunque Microsoft puede pagar mucho dinero a los editores más pequeños para que incluyan sus títulos en Game Pass, los más grandes no siempre aceptan el dinero ni acceden a poner sus títulos en Game Pass, por diversas razones.
Strauss Zelnick, el jefe de Take-Two, la compañía de GTA y Red Dead, dijo a Bloomberg que poner sus grandes juegos en Game Pass en el lanzamiento no tiene “ningún sentido”.
