Todo parece indicar que el camino evolutivo que ha tomado la industria de los videojuegos estará relacionado con la realidad virtual. En la actualidad, las gafas de RV ya son requeridas para un buen número de juegos, e incluso para participar en la ruleta online que ofrecen los casinos digitales en internet.
Con estas gafas se dan los primeros pasos para que el usuario pueda experimentar sensaciones totalmente inmersivas, avanzando hacia la alta definición con el objetivo de adelgazar cada vez más la línea que divide la realidad de lo creado por una computadora.
El potencial de esta tecnología ya se puede apreciar en sus primeros estadios con herramientas como el HTC Vive, las Oculus Rift o las PlayStation VR, ofreciendo una pequeña muestra de lo que cabe esperar.
Una nueva oportunidad para el ocio
Las fórmulas para el ocio y el entretenimiento se multiplican con este aporte tecnológico llamado a cambiar las relaciones humanas con el entorno y con las propias personas. No se puede negar que la tecnología desafía constantemente las capacidades humanas, en el exclusivo campo de la diversión, los diseñadores de juegos tienen aquí un mundo nuevo donde experimentar y desarrollar nuevas experiencias.
La industria del entretenimiento se encuentra ante una excelente oportunidad de probar y combinar la tecnología de la realidad virtual con esquemas y fenómenos sociales ya existentes, abriendo nuevos mundos donde interactuar.
La realidad virtual da un paso más allá de lo posible
Con esta tecnología y sus periféricos no sólo se percibirán las cosas en tres dimensiones, sino que la experiencia será inmersiva, es decir, el jugador se encontrará justo en medio de la acción. Esto quiere decir que, además de ver las cosas desde otro punto de vista, también hace posible colocar a los jugadores dentro de una simulación, en el lugar de terceras personas y vivir, de este modo, todas sus experiencias.
Además de poder estar en cualquier parte del mundo o del universo, real o inventado, también va a permitir ser un personaje creado o uno mismo, quizás en una mejor versión, con distintas y más avanzadas capacidades, si se prefiere.
La implicación del jugador con el juego se lleva a su máximo exponente, se llegará a sentir responsabilidad real sobre lo que ocurre alrededor, obligándose a actuar al 100% de sus capacidades.
Las herramientas necesarias
Es bien cierto que, en este momento, el acceso a este tipo de juegos está limitado fundamentalmente por los precios que alcanzan las herramientas necesarias para el juego. Un problema que, en cualquier caso, está disminuyendo y que terminará por desaparecer, ya que la competencia hace que se democratice rápidamente toda la maquinaria digital relacionada con el ocio.
Las que actualmente se encuentran en el mercado y ya han bajado de precio son las Oculus Rift, que fueron las primeras en ponerse al alcance del gran público y, aunque resultan demasiado bastas, parecidas a unas gigantescas gafas de esquí sujetas con una cantidad nada despreciable de cintas y van conectadas con cables al dispositivo, el resultado es realmente impactante en cuanto a sensaciones.
El mercado ha ido surtiendo de más variedad con el paso del tiempo, pudiéndose adquirir otros modelos, como las Google Cardboard o las ya mencionadas HTC VIVE y las PlayStation VR.
