El veterano de la industria de los videojuegos Martin O’Donnell, quien compuso la música para Halo y estaba en la junta directiva de Bungie, ha hablado abiertamente sobre el trato que Bungie hizo con Activision y cómo todo se “vino abajo”, según sus propias palabras.
Es decir, O’Donnell tuvo un mal presentimiento sobre el acuerdo para la serie Destiny desde el principio, pero toda la historia es como algo sacado de una película.
Según el vídeo previamente mostrado, hablando con YouTuber HiddenXperia, O’Donnell primero aclaró que fueron los siete miembros de la junta directiva de Bungie quienes colectivamente tomaron la decisión de trabajar con Activision. O’Donnell también era uno de los miembro, por lo que reconoció su parte en la decisión. O’Donnell también afirma que aun continúa teniendo acciones en Bungie.
Al discutir los orígenes del acuerdo, O’Donnell dijo que tenía dudas de inmediato. “Sabíamos que era un riesgo desde el primer momento”, dijo. “Resultó ser exactamente tan malo como pensamos que sería. Todos los que ya no trabajan para Bungie dirán: ‘Sí, fue malo desde el principio'”.
O’Donnell dijo que los superiores en Bungie que aún trabajan allí no reconocerán que fue un trato problemático desde el principio. “Si todavía trabajas para Bungie, serás político y dirás todo tipo de cosas como, ‘Oh, tuvimos una buena asociación y bla, bla, bla, pudimos construir algo maravilloso. Y Llegó el momento de ir por caminos separados porque cada uno tenía objetivos diferentes, pero estamos felices y nos amamos ”. Eso es BS “, dijo O’Donnell. “Hay tantas respuestas escritas que escucho”.
El ex compositor afirma que Bungie entró en su acuerdo con términos estrictos, exigiendo el control sobre la IP de Destiny.
Eso descartó que varios “grandes inversores” publicaran el título, incluido Microsoft.
“La razón por la que fuimos a Activision no fue solo por el dinero, sino porque, como parte del contrato, no poseían la IP. Ahora, recuerden, Microsoft posee la IP de Halo, y queríamos asegurarnos de quien sea que trabajemos con el siguiente no sería dueño de la IP “. Y Activision estuvo de acuerdo con eso. Todos los otros grandes jugadores durante ese período no aceptarían hacer eso, incluido Microsoft. Estuvo muy cerca de hacer un serio … casi volvemos a Microsoft, si puedes creerlo”.
Microsoft se separó del desarrollador de Halo en 2007, cuando Bungie hizo la transición a una compañía privada e independiente, mientras que la marca Halo permaneció internamente con Xbox. La supuesta asociación habría sesgado drásticamente el futuro Destiny, que en cambio disfrutaba de varias exclusividades por tiempo limitado en PlayStation, como una extensión de su acuerdo con Activision.
Destiny 2 se ha cambiado a un modelo gratuito desde que se separó de Activision, con expansiones de apoyo programadas para los próximos meses y extendiéndose a las consolas de próxima generación.
