Sony anunció recientemente que la PS5 vendió 10 millones de unidades, lo que la convierte en la consola de venta más rápida en la historia de la compañía. Sin embargo, esta generación ha sido muy difícil no solo para Sony, si no también para Microsoft y Nintendo por no poder suplir la demanda actual de consolas.
El CEO de Sony Interactive Entertainment, Jim Ryan expresó sus sentimientos sobre la escasez global de PS5 y durante una entrevista con Reuters, dijo que si bien Sony está trabajando activamente para resolver los problemas de suministro, parece que esta escasez no tiene fin en el corto plazo.
“Hemos construido más consolas PS5 más rápido que nunca, lo que me hace feliz. Pero, por otro lado, estamos un tiempo antes de poder satisfacer toda la demanda que existe, lo que me hace sentir mal “.
La escasez global de chips y el scalping generalizado han hecho que conseguir una PS5 sea extremadamente difícil desde su lanzamiento, y la demanda sin precedentes de la consola significa que probablemente no terminará pronto. Recientemente Sony anuncio una PS5 rediseñada que será más liviana que la versión de lanzamiento, aunque esta vez no hay cambios internos.
