Hace unas semanas, Marcus Lehto, cocreador de Halo, quien empezó a trabajar como desarrollador líder en una filial de EA, dejó Ridgeline Games, estudio perteneciente a Electronic Arts (EA), de una manera que despertó sospechas. Por lo general, no se escucha mucho sobre este tipo de situaciones, pero su salida dejo mucho ruido.
Lehto ha decidido compartir sus pensamientos de manera abierta y honesta sobre su salida del estudio Battlefield, que cerró un día después de su partida, y definitivamente no son positivos:
“No he dicho mucho aquí, ya que no tengo nada positivo que decir sobre EA. Mi reciente partida y la de muchos otros, incluido mi equipo, ha sido dolorosa debido a los despidos generalizados en la industria”.
Esto es probablemente todo lo que puede decir sin meterse en problemas legales, pero aun así es más que suficiente para confirmar que Electronic Arts, al igual que muchas otras compañías gigantes en la actualidad, no es precisamente el mejor lugar para trabajar.
Not been saying much here since I don’t have anything positive to say about EA, my recent departure, and how so many, including my team, are suffering due to the industry sweeping layoffs.
— Marcus Lehto (@game_fabricator) March 15, 2024
Parece que las sombras de la insatisfacción laboral se ciernen sobre el mundo de los videojuegos, incluso para aquellos que han contribuido a franquicias icónicas como Halo y Battlefield.
Es un recordatorio de que, detrás de los juegos que disfrutamos, hay personas que enfrentan desafíos y dificultades en su entorno laboral. Quizás, en el futuro, las empresas puedan aprender de estas experiencias y crear entornos más saludables y satisfactorios para sus creadores.