Enotria: The Last Song Review

-

Con la proliferación del sub-género Soulslike, nos han estado llegando muchos títulos que ofrecen una experiencia diferente a los Dark Souls, como el reciente Deathbound, que si bien no inventa la rueda, al menos es una propuesta decente. Otro de esos títulos que sigue esa tendencia es Enotria: The Last Song del estudio italiano Jyamma Games.

Es un juego con una propuesta única en cuanto a su lore, al abordar el folklore italiano de una manera artística, si se quiere decir. Sin embargo, el juego se molesta lo necesario para enseñar sus mecánicas clave, aun así, se le puede dar una oportunidad si nos gustan este tipo de títulos desafiantes.

El mundo es una obra teatral

Algo que destaca a primera vista de Enotria: The Last Song es su ambientación, a diferencia de otros juegos del género, que tienen atmósferas lúgubres y oscuras. Aquí tendremos entornos muy coloridos que recuerdan a muchos poblados de la cultura italiana. Incluso, en vez de iniciar en una cementerio, mazmorra o pantano de lo más creepy, el jugador inicia en lo que parece una cueva bastante iluminada para luego dar paso a un hermoso campo de girasoles, algo que contrasta con los inicios de lo que suelen ser este tipo de juego.

Los jugadores tomarán el papel (nunca mejor dicho) del Desenmascarado, una marioneta sin rostro que despierta en lo que parece ser un mundo dominado por Canovaccio, una obra teatral perpetua. Este fenómeno, mantiene a todos los que están dentro de su influencia en un bucle permanente que los obliga a revivir su papel dentro de la obra una y otra vez. Aquí es donde entra Pulcinella, quien no ha caído bajo el influjo del Canovaccio y que nos guía para terminar de una vez por todas con esta maldición.

En cuanto a lore, me pareció un universo bastante rico que se va construyendo a medida que recolectamos documentos que nos cuentan parte de este mundo colorido. De hecho, en el menú de opciones hay una sección que recolecta toda la información obtenida como si de una biblioteca se tratara. Me pareció genial ese detalle, tomando en cuenta que la mayoría de juegos del género, dejan que sea el jugador que construya su propia historia según lo que ve.

Nos encontraremos a personajes por el camino y que también están atrapados en el bucle, algunos han caído presa de la locura, y se han convertido en los jefes de nivel. Sin embargo, los NPC apenas tienen varias líneas de conversaciones, pero no se ahonda en sus historias personales, algo por lo que los Dark Souls son conocidos. Incluso, los mismos enemigos, incluyendo jefes, no tienen ese trasfondo que nos haga entender sus motivaciones para hacer lo que hacen dentro del juego.

Crea tu propio destino

En Enotria: The Last Song, tenemos los controles habituales del género con uno que otro cambio en la configuración de botones, pero a grandes rasgos, es más cercano a Bloodborne. Tenemos un set de movimientos para cada arma, uso de objetos consumibles, recuperación de salud mediante frascos, mecánicas de esquive/parrys, y potenciadores. Otra mecánica es el lanzamiento de habilidades que se llenan según ataquemos a los enemigos por lo que el juego requiere que seamos muy ofensivos. Tenemos un árbol de habilidades llamado Camino de los Innovadores, bastante extenso que determina nuestra forma de jugar a través de cuatro ramas.

Pero la mecánica fundamental del título es el cambio de máscaras, que básicamente vienen a ser las clases (aquí llamadas Papel), solo que aquí disponemos de tres sets de equipamiento y podemos cambiar entre ellos en tiempo real pulsando un botón. Las máscaras, otorgan, ya sea cambio de clases a Guerrero, Pícaro, Mago, etc; potencian efectos, permiten manejar cierto tipo de armas y más. Estas se consiguen derrotando enemigos, sobre todo jefes, o en cofres secretos. Esto nos da posibilidades de construcciones de personajes interesantes. En mi caso, me gustan las armas de gran envergadura, algunos atributos mágicos y combate a distancia, y claro que podemos tomar el camino que más dominemos.

El combate es divertido, solo que requiere algo de pulido para tener un sistema de pelea redondo. Es una mezcla de lo mejor de cada juego de FromSoftware porque conlleva aprender las mecánicas clave de cada uno de esos juegos. Por ejemplo, tenemos una Barra de Postura como en Sekiro que cuando se llena, los enemigos entran en el estado desenredado, que lo deja expuesto a un remate. Esta mecánica requiere que realicemos parrys en el momento exacto y ser muy ofensivos para llenar dicha barra. No existe mecánicas de bloqueo, por lo que se opta por el botín de parry o esquivar como en Bloodborne.

Sin embargo, depende del ensayo y error, porque las ventanas de parada resultan frustrantes de aprender debido a las animaciones erráticas de los enemigos. Muchas veces, dependeremos de esquivar, pero hacer esto, prolonga las batallas contra los jefes. Es un sistema interesante que puede dar mucho de sí, pero que si no se domina, pasaremos por alto por otras opciones de ataque.

Los enemigos son parte muy importante de los títulos de este género y en Enotria: The Last Song tendremos una muy buena variedad. Están los enemigos comunes que nos encontramos a cada paso, detrás de columnas escondidos o en grupos y que no se deben subestimar; están los intermedios, de un tamaño respetable y de gran resistencia; por último, los jefes de nivel, muy desafiantes y que requieren de toda nuestra habilidad para derrotarlos. Sin embargo, algunos patrones se repiten, incluso de juegos ajenos a este, pero incluso, Elden Ring cometió ese mismo error.

Manejo de los elementos

Un manejo muy interesante que se le dio al juego fue con los efectos de estado, ya que ajustaron esta mecánica para que el juego sea más estratégico. En este mundo hay cuatro elementos: Vis, Gratia, Fatuo y Malanno. Cada uno es adverso al otro y saber explotarlos es la clave para la supervivencia, ya que ofrecen una ventaja y una desventaja.

  • Vis: Es un estado de Mareo (embriaguez) en el que se reduce nuestra defensa pero nuestro daño aumenta.
  • Gratia: Provoca el estado Refulgencia que nos cura mientras dura el efecto, pero si se llena recibiremos una explosión que nos quita buena parte de nuestra salud.
  • Fatuo: Inflije el estado Enfermedad y cualquier daño que inflijamos a los elementos aumenta, pero los enemigos recuperarán salud a medida que nos golpeen.
  • Malanno: Provoca el estado Maldad en el que perdemos salud paulatinamente y además es contagioso.

Esta mecánica refuerza aun más las construcciones de personajes, sin embargo, el problema es que se pueden pasar por alto fácilmente. El juego tiene una constante de explicar poco sus mecánicas básicas, además de que se les da unos nombre muy poéticos que pueden confundir al jugador. Con un poco más de contexto, los jugadores podrían sacarle mucho provecho a este tipo de opciones.

Un carnaval eterno

Enotria: The Last Song está creado en Unreal Engine 5, y ofrece unos gráficos muy coloridos frente a otras propuestas del género, destacan sus escenarios llenos de vida y ese eterno atardecer de algunas de sus secciones es impresionante. El diseño de personajes es digno de mención, con esas vestimentas propias de una época muy detalladas que evoca muy bien la sensación de trasladar la acción a una Italia rural medieval. Sin embargo, el mismo problema de los motores Unreal Engine se manifiestan aquí: caídas puntuales de frames, popping, el eterno efecto de blur. Pero nada que arruine la experiencia, al menos en mi caso.

Su apartado sonoro es igual de impresionante, con temas muy bien trabajados, orquestales y con cánticos que recuerdan lo mejor del género. Viene doblado al inglés con regionalismos italianos, y voces que cumplen su trabajo, dentro de lo que cabe. Realmente, consiguieron una ambientación muy bien lograda.

Veredicto

Enotria: The Last Song es un Soulslike que se destaca por varias propuestas únicas en su propuesta como una ambientación muy genuina basada en el folklore italiano, giro interesante en algunas de sus mecánicas, dirección de arte, y como no, una dificultad respetable. A nivel de jugabilidad, escoge lo mejor de varios de los juegos de FromSoftware y los hace propios, aunque a decir verdad, requieren algo de pulido como el sistema de parrys. Los combates son muy disfrutables, aunque a la larga se vuelven algo repetitivos. Gráficamente es hermoso, aunque con su dosis habitual de errores menores. No inventa la rueda pero es un título agradable y disfrutable.

Nota: Este review fue realizado en PS y el código fue cedido gracias a Jyamma Games.

SUMARIO

Enotria: The Last Song es un titulo Soulslike que se desmarca de lo habitual por su ambientación y lore basado en el folklore italiano. Nos ofrece combates desafiantes con mecánicas únicas, a las cuales les faltó algo de cocción. En líneas generales, es un buen juego que los fans del género sabrán apreciar sus virtudes, más que sus carencias.
Rubén E. Castillo A.
Rubén E. Castillo A.
Publicista, cínico-sarcástico, sin bandos ni ídolos, RPG Lover... creo que estaré jugando todavía a los 90.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

SÍGUENOS

226,365FansMe gusta
26,300SeguidoresSeguir
3,774SeguidoresSeguir
4,025SuscriptoresSuscribirte

APROVECHA ESTAS OFERTAS

DESTACADAS

Enotria: The Last Song es un titulo Soulslike que se desmarca de lo habitual por su ambientación y lore basado en el folklore italiano. Nos ofrece combates desafiantes con mecánicas únicas, a las cuales les faltó algo de cocción. En líneas generales, es un buen juego que los fans del género sabrán apreciar sus virtudes, más que sus carencias.Enotria: The Last Song Review